Los dos «bandos» de la agrupación se acusan de irregularidades en las afiliaciones.
Las aguas vuelven a bajar revueltas por Pontecesures y no en el Ulla, sino en la Agrupación Socialista de la villa, que esta noche celebra tres asambleas extraordinarias, todavía más dividida de lo que estaba hace más de un año.
En la primera se debatirá la propuesta de la Ejecutiva local, que pide la dimisión de los concejales elegidos en la lista del PSOE, Luis Sabariz y Alfonso Diz, actualmente en situación de no adscritos, para sustituirlos por dos militantes socialistas.
Sin embargo, el resultado de la votación es una incógnita, debido a la fuerte división interna que provoca la lucha por el poder en el seno de la agrupación y que ha desembocado en veladas acusaciones mutuas sobre presuntas irregularidades en las afiliaciones.
La mecha estalló hace poco más de un año, cabe recordar, cuando la Ejecutiva Provincial relegó a la agrupación encabezada porl el secretario general y entonces edil, Oscar Gerpe, para apostar por un nuevo candidato en las elecciones municipales, Luis Sabariz, en aquel momento líder de los independientes ACP. A él le confiaron la elaboración de la lista, en la que destacaron sus antiguos colaboradores en detrimento de la «vieja guardia». El borrón y cuenta nueva no dio la alcaldía al PSOE. Logró dos ediles y un imprevisto: ambos apoyaron la investidura de Maribel Castro, después de reiterar su negativa a pactar con el BNG, al que echó de la oposición, rompiendo el acuerdo marco.
Así, el PçSOE los expulsó de sus filas y desde entonces continúan en su cargo como no adscritos.
En la campaña de los comocios generales, la Ejecutiva provincial volvió a confiar en los integrantes de la lista de las municipales, lo que enfadó a la agrupación, e incluso se produjeron unas 20 afiliaciones. En principio, éstas fueron denegadas por no condenar la actitud de los ediles, pero «en Madrid déronlles a alta», confirmó ayer el responsable provincial, Modesto Pose, quien rechazó tajantemente las suspicacias de falsificaciones de firmas de solicitud de afiliaciones. «Para afiliarse é imprescindible dar o número de conta. Como ía facer eu iso?. Nin sequera as vin».
Así, achaca las acusaciones a que «hai dous señores que pensan que o PSOE de Cesures é deles.»
También desde este bando se lanzan flechas envenenadas contra los integrantes de la agrupación local, de quines dicen que están afiliando a familiares y allegados para ganar en cantidad a los «nuevos» y poder retomar el mando en la Ejecutiva cesureña.
DIARIO DE PONTEVEDRA, 23/05/08