Los huesos hallados en Pontecesures eran de Lilia Miguéns, desaparecida en 2015.

La autopsia confirma que los restos pertenecen a la septuagenaria, que habría muerto el día de su desaparición por causas naturales -Fueron entregados hace días a la familia. Apenas había dudas, pero la autopsia y los análisis de ADN practicados lo han confirmado: los restos mortales encontrados en agosto de 2017 en un monte de Porto, en el Ayuntamiento de Pontecesures, pertenecían a Lilia Miguéns Iglesias, una mujer que había desaparecido dos veranos antes, a la edad de 79 años.

Vivía en el lugar de A Devesa, en la parroquia de Campaña (Concello de Valga) y había sido vista por última vez en junio de 2015 cerca de río Ulla, en el Ayuntamiento de Padrón, situándose todos los lugares citados hasta aquí en un reducido radio de acción. Los huesos de la septuagenaria recuperados para la autopsia -el cráneo, costillas y diversas partes de las piernas y manos-, fueron entregados hace un par de semanas a su familia, que hace días ofició una misa en su memoria en la iglesia de Pontecesures.

Al parecer no se encontraron signos de violencia y se cree que Lilia Miguéns falleció el mismo día de su desaparición, y en ese preciso lugar -el monte de Porto-, por causas naturales.

Esto permite cerrar el caso que se tramitaba desde el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Caldas de Reis, y que había llevado a las fuerzas de seguridad a investigar a diversos familiares y allegados de la víctima.

De este modo puede concluirse que Lilia Miguéns Iglesias falleció a escasos quinientos metros de su casa y que su cuerpo permaneció tirado en el monte de Porto un par de años, por lo que sufrió las consecuencias no solo del proceso de descomposición natural, sino también de la presencia de animales en la zona arbolada.

Esto último hizo que los huesos que permanecían en el lugar -ya no estaban todos-, acabaran parcialmente cubiertos por la maleza y desperdigados.

Como se explicó en agosto pasado fueron encontrados, junto a la ropa y las gafas de la víctima, tras declararse en aquel monte de Porto un incendio forestal, presuntamente intencionado.

Al día siguiente acudieron al lugar el alcalde, José Manuel Vidal Seage, y el jefe de Protección Civil. Querían inspeccionar la zona para determinar el alcance de los daños causados por el fuego, y lo que se toparon fueron los restos óseos de un ser humano, lo cual encendió todas las alarmas.

“Vi que en el suelo había lo que me parecía un fémur; al principio dudé de si sería humano, pero más adelante vi otro, y también una tibia, y a unos diez metros estaba la calavera, por lo que ya no me quedó duda alguna”, declaraba el regidor pontecesureño tras aquella primera inspección ocular.

También confirmaba que los huesos habían sido esparcidos por los animales y aclaraba que “eran los restos óseos de una mujer; aparentemente de avanzada edad, a juzgar por el estado de su dentadura y las ropas que permanecían esparcidas por el suelo”.

Esto llevaba a Vidal Seage a manifestar que los vecinos, “perplejos” ante el macabro hallazgo, “creen que se trata de aquella mujer que desapareció hace un par de años”.

Se refería a Lilia Miguéns, y esa fue también la primera hipótesis manejada y la línea de investigación abierta por la Guardia Civil, que como ahora confirma la autopsia estaba en lo cierto.

Solo quedaba confirmarlo con pruebas como las de ADN, ya que los huesos recogidos en el lugar por la Policía Judicial para su traslado al Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Pontevedra estaban “totalmente limpios”.

Cabe apuntar que si bien esos restos estaban en una zona arbolada, no se trata de un espacio alejado del núcleo poblacional o de difícil acceso, sino que es un pequeño monte rodeado de viviendas -e incluso un campo de fútbol muy frecuentado- que Lilia Miguéns conocía bien.

En su momento, cuando en verano de 2015 se denunció su desaparición, se puso en marcha un operativo de búsqueda por los alrededores, y lógicamente también por esa zona arbolada, aunque como es evidente no dio resultado.

Faro de ?Vigo

Estaba enferma y necesitaba medicación.

El 25 de junio de 2015 Lilia Miguéns Iglesias fue vista con vida por última vez. Esta mujer, que el mes que viene cumpliría 82 años, medía 1,50 metros y residía en Devesa (Valga), se ausentó de la vivienda que compartía con un hermano vistiendo una chaqueta y falda gris, además de un gorro del mismo color con una flor. Llevaba gafas y, según se indicó en un primer momento, precisaba medicación debido a una grave enfermedad que padecía.

La buscaron por tierra, mar y aire.

Tras saberse de la desaparición de Lilia Miguéns, el 26 de junio de 2015 efectivos de Protección Civil de varios municipios, Guardia Civil, buzos, una unidad canina y un helicóptero ponían en marcha un operativo de búsqueda que se centró inicialmente en la zona de Lestido (Padrón), ya que un vecino aseguró haber visto a la mujer en ese lugar a eso de las 19.00 horas. Se la buscó por tierra, con ayuda de unidad canina, y en el agua, tanto en el río Ulla como en uno de sus afluentes, el Sar, en este caso con apoyo de una lancha y buzos de la Guardia Civil. Como se dijo entonces Protección Civil de Valga, Pontecesures, Caldas y Padrón participaban en el peinado de las inmediaciones del río y de las proximidades de la vivienda en la que residía Lilia Miguéns desde unos años antes, cuando había regresado al domicilio familiar desde Lugo, donde tiene un piso. Aquella búsqueda continuó en días posteriores, pero nunca más se supo de la septuagenaria hasta dos años después, cuando gracias a un incendio forestal fueron descubiertos sus huesos a solo 500 metros de su vivienda.

Faro de Vigo

El GES de Valga estrena embarcación para salvamentos en el río Ulla.

Los servicios de emergencias del Concello de Valga cuentan con una nueva embarcación neumática aportada por la Xunta de Galicia con el objetivo de mejorar la respuesta ante eventuales emergencias acuáticas y reforzar, de esta forma, la labor fundamental que realizan, dotándolos de más medios y recursos.

La embarcación semirrígida cuenta con cinco metros de eslora y un motor de 60 caballos, además de con un remolque para su transporte por tierra.

Se empleará en operativos de búsqueda en el río, en el acompañamiento de rutas fluviales y también en labores de apoyo al Sapraga (Plan de Salvamento en Praias) durante el verano, con atención especial a la playa fluvial de Vilarello.

Además, también servirá para otro tipo de intervenciones en el medio acuático, como el control de pruebas deportivas o la supervisión de búsquedas.

Los servicios de emergencias de Valga ya contaban con otra embarcación, aunque del año 2000 y de tan solo tres metros de eslora, con un motor de 25 caballos, por lo que el servicio gana en prestaciones con esta nueva incorporación.

Además de la nueva embarcación, el Grupo de Emerxencias (GES) y la agrupación de voluntarios de Protección Civil de Valga recibieron recientemente de la Xunta de Galicia un desfibrilador.

Estos equipamientos permitirán ofrecer un mejor servicio en beneficio de la seguridad de los vecinos del municipio.

Faro de Vigo

El Concello de Valga solicita una Diputación dos becarios, un arquitecto y un licenciado en derecho.

El Concello de Valga acaba de adherirse al lan de Prácticas Laborais de la Diputación de Pontevedra mediante la solicitud de dos becarios. Uno de ellos debe ser licenciado en Derecho y el otro un arquitecto. El objetivo es reforzar la plantilla municipal.
El plan se dirige especial a aquellas personas con titulación universitaria o de formación profesional de ciclo superior y sin experiencia profesional previa, de manera que puedan completar su formación académica mediante la realización de un proyecto formativo que les proporcione experiencia y la práctica profesional necesaria para facilitar su inserción en el mercado laboral.
A este programa se pueden acoger municipios de la provincia de Pontevedra de menos de 50.000 habitantes, distribuyéndose en función de la población. De esta manera, a Valga le corresponde dos becarios al tener menos de 10.000 residentes. El propio Concello pudo elegir las titulaciones que más le interesaban y también designar titulaciones suplentes por si la bolsa solicitada resulta vacante por falta de candidatos.
Así, como titulaciones alternativas Valga se decanta por un licenciado en Administración e Dirección de Empresas y por un ingeniero de Telecomunicaciones, según explican desde el Concello que gobierna el conservador José María Bello Maneiro.
Tutorización municipal
Las becas tienen una duración de seis meses con posibilidad de prórroga durante otro medio año. La Diputación abonará a los becarios la ayuda económica establecida, los dará de alta en la Seguridad Social y tramitará un seguro de responsabilidad civil que cubra las contingencias que se produzcan como consecuencia de la realización de las prácticas.
El Concello, por su parte, designará a un trabajador que actuará como tutor y que se encargará de facilitar a la persona becaria su integración en la entidad, asesorarla en los momentos que necesite, velar por su formación y por el cumplimiento de la práctica y supervisar las tareas que desempeñe en el día a día.

Diario de Arousa

La XII Exposición da Camelia Bella Otero regresa al Auditorio de Cordeiro.

El Auditorio Municipal de Valga, en Cordeiro, acoge entre hoy y mañana la XII Exposición da Camelia Bella Otero; una de las citas más destacadas del calendario para los cultivadores y los amantes de dicha flora.

La recepción de las camelias de los expositores comienza a las diez de la mañana, mientras que a la una de la tarde se abre la muestra al público. Para las 18.30 horas se anuncia el festival “Música entre camelias”, con actuación de la Coral Polifónica Santa Comba y de diferentes solistas de la Escola de Música Municipal de Valga, además de hacerse un reconocimiento a los expositores participantes.

Mañana se dedica la jornada íntegramente al público, que puede acceder al recinto entre las 11.00 y las 20.00 horas.

Faro de Vigo