Un vehículo se empotra de madrugada contra el cierre de una casa en Campaña.

«Oímos tres topetazos criminais. Ata se sentiron caer os cristais do coche no chan, pero estabamos tan asustados que non saímos da casa ata que a Garda Civil nos petou á porta». Es el relato de la propietaria de una vivienda de Campaña contra la que un vehículo se empotró de madrugada.

El accidente está rodeado por el misterio. Las consecuencias son bien visibles: una farola del alumbrado público caída, una señal de la carretera aplastada, el cierre de la casa dañado, el portal arrancado, restos del coche por el suelo… Pero aún así ni la Policía Local ni Protección Civil de Valga tenían ayer constancia de lo que había ocurrido. Maruja sí lo sabía y tardará en olvidarse. Es la propietaria de la vivienda en cuestión, contra la que, sobre las cinco de la mañana del martes al miércoles, se empotró un coche.

La mujer relata que el vehículo, que circulaba por el vial PO-548, colisionó de forma brusca con una señal vertical de la carretera, arrancó de cuajo la farola del alumbrado público y la dobló por varias partes, chocó contra el poste de una viña y se empotró, finalmente, en el cierre del inmueble, arrancando la cancilla y dañando una columna.

En una pista > El vehículo se frenó en una pista que separa la vivienda de un hotel contiguo, «mirando cara Santiago». «O ruido foi tremendo, sentíronse tres topetazos criminais e o meu home pensou que foran tronos. Tiñamos tanto medo que non saímos a fóra. Miramos pola ventana e vimos baixar a dous chavales do coche e como falaban con alguén por teléfono», explica Maruja, que cree que «estarían chamando á Garda Civil. Marchar non podían porque o coche tivo que vir buscalo a grúa e, ademais, aínda que non dixeran nada íase saber. Os pedazos do vehículo quedaron ciscados pola nosa entrada e a farola caída diante na porta».

La vecina, todavía con el susto en el cuerpo, no pudo precisar si estaban o no heridos, aunque «parecía que non tiñan nada e ademáis non sei nin quenes eran». Al rato la Guardia Civil llamó a su puerta «e díxonos que non nos preocuparamos, que o seguro se faría cargo de todo», comenta la valguesa que, ante todo, se congratula porque el accidente no hubiera tenido consecuencias más graves. «O mellor de todo foi que non pasou nada», dice. Aunque, eso sí, el sobresalto en plena noche será difícil de olvidar para esta familia de Campaña.

DIARIO DE AROUSA, 06/02/08