La provincia de Pontevedra dispondrá finalmente de 70 campos de césped artificial, entre ellos el de Pontecesures.

Pontevedra dispondrá finalmente de 70 campos de césped artificial
La Diputación anuncia 15 terrenos sintéticos más en una jornada sobre mantenimiento de instalaciones.

A la visita a un campo de hierba artificial en Soutomaior asistieron los concejales Rafael Randulfe, Javier Quintá y el empleado municipal José Manuel Moreiras Eitor.

Pontevedra dispondrá finalmente de unos 70 campos de fútbol de césped artificial y se situará «entre as primeiras» provincias de España en este tipo de instalaciones. La Diputación anunció ayer que añadirá otros 15 terrenos más a los 52 que ya están en obras o en funcionamiento.

El plan, cofinanciado con los ayuntamientos, supondrá un gasto próximo a los 24 millones de euros. El coste de algunos terrenos, si se incluyen los cierres e instalaciones auxiliares, se aproxima a los 600.000 euros (100 millones de pesetas).

La provincia tendrá así una media de un terreno sintético por municipio, si bien no todos los ayuntamientos gozarán de una instalación de este tipo. Algunos concellos no tienen base deportiva suficiente ni medios económicos para hacerse con un terreno sintético, según apuntó el presidente del organismo provincial, Rafael Louzán, al dar cuenta de la ampliación del programa en una jornada sobre mantenimiento.

El dirigente provincial dijo que en un programa de este tipo su gobierno había corrido «o risco de equivocarse». No obstante, dijo que al final «acertamos de pleno» y solo admitió fallos en los marcadores electrónicos.

También anunció la convocatoria de un concurso para el mantenimiento especial de los campos, a realizar cada seis meses o un año, y que estará a cargo de una empresa. El 75% de este contrato será pagado por el organismo provincial y el 25% por los propietarios de los terrenos artificiales.

Louzán dejó claro, no obstante, que los propietarios de los campos (concellos en casi todos los casos) deberán realizar el mantenimiento ordinario y que la Diputación no pagará la reposición de materiales «por mal uso».

Técnicos de la empresa instaladora insistieron ayer en la necesidad de que los propietarios de los campos los mantengan limpios y en que pasen el cepillo cada semana o diez días. Además, dieron instrucciones sobre cómo actuar en el caso de que haya algún derramen especial sobre el césped.

También señalaron que hay que evitar que los aficionados y el banquillo coman pipas y frutos secos con cáscara o fumen dentro del recinto sintético y asomados a la valla. Además, hicieron hincapié en la necesidad de los riegos para refrescar el material sintético, y pidieron que se mantengan despejadas cañerías y tuberías con especial atención a los brotes vegetales que puedan surgir, especialmente en zonas de bosque.