Saneamiento y depuración, dos de los logros que destaca Castro.
La alcaldesa y candidata por IP hace balance positivo de la legislatura
Su proclamación como alcaldesa hace cuatro años fue la gran sorpresa de los comicios de entonces, al salir electa, con un único edil por IP con el bastón de mando gracias al pacto suscrito con PP, liderado por Rafael Randulfe y por aquel entonces el PSOE, encabezado por el independiente Luis Sabariz (hoy no adscrito). «Nadie apostaba entonces porque el tripartito durase más de tres meses, pero duró toda la legislatura y podemos definir la acción de gobierno conjunta de muy positiva», recalca Maribel Castro, quien achaca el éxito de la coalición de gobierno «a que soy una mujer y las féminas ya se sabe que saben apaciguar y mediar mejor» (ríe).
De la gestión de estos cuatro años, Castro, que repite por IP, destaca las obras en saneamiento y depuración acometidas al amparo de los planes estatales FEIL, al PCC y al plan anticrisis de la Diputación; la ampliaciones y mejoras de caminos y calles centrales, gracias al PIR y PEIM; proyectos de reurbanización, realizados en base a planes ya citados y a los proyectos realizados por el taller de empleo; el albergue, el campo de fútbol de hierba sintética; el saneamiento de las arcas municipales logrando «un remanente de tesorería positivo». La apertura del Concello a los vecinos y la puesta en marcha de la depuradora de Grobas, son otros de los puntos destacados del mandato por la alcaldesa cesureña.
Maribel Castro, que reconoce que fueron cuatro años difíciles por la situación de crisis, destaca sin embargo, las inversiones acometidas por más de 1,3 millones de euros procedentes de las administraciones central, autonómica y provincial. Como retos de futuro se plantea: «Luchar por el polígono empresarial y evitar la marcha de las empresas asentadas aquí; la construcción de un auditorio; dotar a todos los núcleos de locales sociales y seguir potenciando todas las actividades puestas en marcha en esta legislatura», añade.
Si de algo se siente orgullosa Castro es de «haber tenido el respaldo de los vecinos y el haber hecho acciones positivas por el pueblo», dice, apuntando que «cuando entré en política me planteé un objetivo, el ser alcaldesa. Lo he conseguido. Ahora me vuelvo a presentar para seguir luchando por Pontecesures. Mi meta es la alcaldía. Pero decidan lo que decidan las urnas, IP seguirá trabajando desde donde le toque», sentencia la candidata.
EL CORREO GALLEGO, 20/04/11
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