En 2010 se concedió licencia de rehabilitación, pero no se usó.
En el año 2010 se concedió licencia a Plácida Castro Magariños para rehabilitar el edificio que ocupaba el restaurante Casa Castaño para habilitar «cuatro viviendas y locales -se supone que comerciales- en la calle Víctor García, número 20, esquina con la calle José Novo Núñez número 1». Se hacía una vez obtenida autorización de Patrimonio de la Xunta, ya que la fachada del inmueble que da al río Ulla está protegida.
El hecho de que se presentara aquel proyecto y se concediera licencia hacía albergar ciertas esperanzas de recuperación de un edificio otrora importante que ahora afeaba enormemente el entorno, a pesar de situarse en un lugar estratégico, junto a la entrada de la villa desde Padrón. Pero la mejora no llegó a ejecutarse y siguió pudriéndose en el olvido.
Desde entonces fue motivo de interpelación en el pleno de la Corporación en más de una ocasión, se produjeron problemas con los okupas, el deterioro siguió y ayer llegaron las llamas.
Faro de Vigo
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