La esquiva lamprea del Ulla llega a las redes de los valeiros y se despacha a más de 60 euros.
Tras la primera del año, que cayó hace días en una pesqueira de Herbón y se colocó a 100, ahora aparecen en Pontecesures
Una de las lampreas del Ulla adquiridas por Casa Barqueiro.
FARO DE VIGO ya había explicado la semana pasada que la primera lamprea en el Ulla cayó en una de las nasas colocadas en las pesqueiras de Herbón. Y que se vendió a 100 €.
Más concretamente en las construcciones que ya empleaban los romanos y que ahora explota un pescador tan experimentado como Antonio Caldelas, un viejo conocido de los lectores del decano de la prensa nacional.
Esta semana la lamprea también hace sonreir, aguas abajo, a los valeiros que operan en Pontecesures. Es decir los pescadores asociados a las cofradías de Rianxo y Carril que lanzan sus nasas butrón desde embarcación.
El lunes volvieron al agua para levantar esos aparejos las tripulaciones de cuatro de las planeadoras empleadas por este colectivo, los cuales los habían largado el viernes.
Y el resultado fue esperanzador, ya que tras una primera semana sin capturas, esta vez se pescaron al menos trece ejemplares, la mayoría colocados en el mercado a 60 € más IVA.
Al decir mercado, se alude a los restaurantes especializados a los que la lamprea del Ulla se vende directamente, los cuales esperan como agua de mayo la captura de este primitivo y cartilaginoso pez por parte de los valeiros.
Unos negocios que a veces pagan cantidades muy elevadas para disponer de este producto y poder satisfacer a sus clientes más exigentes.
El restaurante Casa Barqueiro de Negreira es uno de los establecimientos que se hicieron con uno de los ejemplares, como confirma Pepe Barreiro, el valeiro que suministró el producto.
El mismo pescador confirmó que también Casa Farrucán se llevó parte de las primeras lampreas.
Los valeiros esperan que a partir de ahora las capturas del Ulla vayan en aumento, e insisten en decir que «se espera un gran año», aunque prefieren ser cautos, pues la misma esperanza tenían el año pasado y resultó ser nefasto para sus intereses.
Expectativas que también son elevadas en el caso de los titulares de las pesqueiras ubicadas aguas arriba, toda vez que «el río lleva mucho caudal y eso es bueno para que la lamprea pueda remontarlo» insiste Antonio Caldelas.
Faro de Vigo
0 comentarios