Ejemplo de empresario hacho a si mismo, Andrés Quintá, presidente del Grupo Quintá, lleva la constancia, el sacrificio y la pasión por el oficio como bandera, lo que le ha permitido a su empresa situarse en el primer escalón europeo en clave de productividad. A sus 73 años sigue vigilante y guardián de sus negocios, aunque no por ello deja de disfrutar de los pequeños placeres de la vida como saborear un buen viño albariño.
-Desde su prespectiva como empresario, ¿qué beneficios aporta una fiesta como la del Albariño a la comarca?.
Es una forma de que la gente disfrute y conozca el producto, en este caso un vino único en el mundo, especial gracias a estas tierras y esta climatología tan favorable. La del Albariño, al igual que otras fiestas gallegas como la del pulpo de O Carballiño o la del marisco de O Grove, son celebraciones tradicionales a las que ahora se les ha dado más publicidad. Se convierten asi en un verdadero escaparate de nuestros productos.
-Productos de una gran calidad, además.
Por supuesto. Todos los que se acercan a esta fiestas, de España e incluso del extranjero, conocen un vino que, aparte de la marca, tiene una calidad extraordinaria, tanto para celebrar grandes fiestas y banquetes como para el consumo diario, el «chiquiteo». Podemos hacer un vino cercano y accesible para todo el mundo, siendo competitivos en la relación calidad/precio, sobre todo ahora, cuando todos están afinando el precio en las grandes áreas, en los establecimientos hosteleros…
-¿Usted disfruta del buen vino?.
Yo siempre consumo vino de aquí, y se lo llevo a mis amigos a las ferias a las que voy..Todo lo que sea producto nacional hay que tratar de consumirlo y explotarlo al máxmo.
-Precisamente el Grupo Quintá destaca por su capacidad de exportación, con 3.000 clientes en tres continentes. ¿Cuál es la receta para seguir manteniéndose en primera línea en estos años de dificultades?.
Hay que buscar rendimientos económicos. ¿Y cómo se buscan?. Pues teniendo un oficina técnica que sea capaz de diseñar productos punteros tecnológicamente. si quieres exportar y quieres competir con otras empresas que tienen unos costes un 50% menores de los que tenemos aquí, tienes que ser capaz de aporar soluciones que no aportan otros. Es por eso por lo que siguen demandando nuestros productos.
Han pasado 50 años desde que empecé con una empresa pequeñita, que fue el núcleo de todo lo que se formó después aquí y que nos permite vivir la situación que tenemos hoy. Hay que estar preparado para los vaivenes de la economa, como se sabía en el 73 o en los años 90, que se acercaba una gran tormenta. A eso hay que sumar, además, mucho tesón y sacrificio, y tener una gran capacidad para aguantar. Lo importante es estar aquí con los compañeros, que son los trabajadores. Yo soy el que está vigilante, el que se preocupa de que este barco no se hunda y el que lo lleva a mares calmados y de riqueza.
-¿Ve próxima una salida a esta crisis que padecemos?
Es necesario que circule más dinero para las empresas que estamos al pie del cañón y que no nos rendimos, para manejarnos, movernos; y más nosotros, que podemos asegurar este dinero porque tenemos con lo qu responder para invertir. Hay que ser más competitivo y sostenerse en el mercado para situarse como una empresa líder. Y eso es algo que demostrado durante todos estos años, que estamos trabajando, que estamos funcionando y que luchamos privadamente, en solitario. Las personas ejemplares que crean riqueza y cooperación con la sociedad y crean puestos de trabajo son un impulso a la actividad económica, al dinamizar los factores productivos con la valentía de afrontar los riesgos de la competencia, empleando de manera eficiente los escasos recursos disponibles y proveyendo a la sociedad de los bienes de los bienes y el progreso económico y social del presente y base para el futuro. En el mundo de hoy, el empresario y su empresa desempeñan una importante labor en beneficio de la estabilidad de la sociedad. Hay que perseguir los fines específicos del trabajo social, que les asigna una responsabilidad para triunfar y para alcanzar un favorable progreso económico.
FARO DE VIGO, 03/08/12