La Xunta no aclara si financiará la construcción de aceras en el tramo cesureño de la recta de Campaña.

Los accidentes se producen con frecuencia a lo largo de esta carretera que pasa por Cesures y Valga.

El Concello dice que la seguridad vial es necesaria en los 3 kilómetros de la PO-548

Hace más de un año, Pontecesures comenzó a luchar para que se incluyera en las obras para la seguridad vial de la PO-548 la construcción de las aceras en los 500 metros de la recta de Campaña que corresponden al municipio. La demanda surgió después de que se marginara a este término municipal del proyecto que todavía está ejecutando la Xunta de Galicia en la zona. La Administración, que manifestó en enero de este año su compromiso por incluir el tramo, ha rechazado ahora esta iniciativa señalando, no obstante, que «tendrá especial atención dentro de las posibilidades orzamentarias».
Desde el Concello se ha asegurado que esta noticia es una «gran decepción» para Pontecesures y que teniendo en cuenta la incidencia de accidentes en toda la recta, la inclusión de este tramo municipal es esencial para llevar a cabo una obra completa.
«Primero dixeron que o tema estaba en estudo, agora que o caso ten unha especial atención. A cuestión queda nunha declaración de intencións nunha zona na que os datos estadísticos sobre mortos en carretera están na mente de todos», señaló Luis Sabariz, concejal de Relacións Institucionais de Pontecesures.
Las obras que sí llevará a cabo la Xunta de Galicia en relación con este concello y que han surgido por la actuación que se desarrolla en la recta de Campaña son la sustitución del sistema de tuberías de agua potable que quedó enterrada en el medio de la calzada de la nueva rotonda de A Charca y la recogida de las aguas fluviales de esta misma glorieta.
Más de un año de retraso
Los trabajos en la zona se iniciaron en otoño del 2008. Lo hicieron ya con retraso y precedidos de polémica. Los problemas empezaron con el proceso de ocupación de terrenos, lo cual obligó a la Xunta a negociar con aquellos vecinos que se negaban a ceder sus parcelas. Con las incidencias surgidas en los últimos meses, las obras que debían estar acabadas el pasado verano parece que tienen aún por delante un largo recorrido para finalizar el proyecto inicial.

LA VOZ DE GALICIA, 23/04/10

Los vehículos antiguos regresarán a Pontecesures en junio con la feria «Fegaclasic».

Edición de ??Fegaclasic? de 2009.

El municipio de Pontecesures, que acaba de celebrar el pasado fin de semana la Festa da Lamprea y la Feira do Automóbil Antigo e de Ocasión, tendrá a finales del mes de junio una nueva cita con el mundo del motor y con los vehículos clásicos de la mano de la feria ??Fegaclasic?, que organiza la asociación cultural ??Mirándolle os dentes? con la colaboración de varias entidades privadas.
La feria, dedicada a los profesionales y aficionados a los automóviles clásicos y antiguos, cumple este año su cuarta edición. Se celebrará los días 26 y 27 de junio en la zona portuaria, en la que se habilitarán espacios gratuitos para expositores y vendedores. Se mostrarán y ofertarán coches, motos, camiones, maquinaria, repuestos… además de organizarse otras actividades complementarias como conferencias, concursos o exposiciones.

DIARIO DE AROUSA, 21/04/10

Pontecesures cosecha una afluencia histórica de visitantes gracias a su fiesta de la lamprea.

La villa, que este año presume de Porto Xacobeo, celebró el evento de manera brillante

Pontecesures vivió ayer la que, quizás, puede considerarse la Festa da Lamprea más importante de su historia. Una multitud tomó la zona portuaria para consumir los 310 ejemplares disponibles de este preciado producto propio del río Ulla, pero es que, además, centenares de ciudadanos llegados de otras localidades abarrotaron las calles y diversos establecimientos hosteleros de la villa xacobea antes, durante y después de la degustación.
La soleada mañana dominical animó todavía más el certamen gastronómico, acompañado por el indudable tirón de la Feria del Automóvil Antiguo y de Ocasión, que alcanzó su sexta edición y reunió decenas de vehículos que convirtieron el centro urbano en un gran museo automovilístico.
Si a esto se suma el precio módico y popular al que se cobraron las raciones de lamprea al estilo bordelesa ??10 euros, con derecho a pan, vino y cazuela de barro de recuerdo??, la posibilidad de saborear este manjar fluvial en pinchos ??a 3 euros?? y el ambiente festivo que impregnaron los grupos de gaitas y la charanga, es fácil de entender el por qué del éxito cosechado ayer.
Desde primeras horas de la mañana el ambiente que se respiraba en la villa era ya formidable. Mucho antes de que se sirviera la lamprea (a las dos de la tarde) ya olía a churros, a churrasco y a pulpo á feira, pero también a queso, chorizos, pan recién hecho, miel, filloas y todo tipo de productos tradicionales, de esos que presumen de estar «feitos na casa», y que se vendían en diferentes puestos habilitados para la ocasión en el recinto portuario.
Hasta Pontecesures habían llegado vecinos de diversos puntos de las comarcas de O Sar, Caldas, Santiago, Pontevedra, Barbanza… por allí se veían muchas caras conocidas, como el patrón mayor de Rianxo, Baltasar Rodríguez, o el técnico de Medio Ambiente de O Grove, Francisco Meis.
Estos son sólo un par de ejemplos de que la lamprea y su fiesta pontecesureña traspasan fronteras y mejoran cada año que pasa, pero la afluencia de visitantes, llegados en algunos casos desde muy lejos, demuestra también que un pez que para algunos resulta realmente feo se convierte en un manjar cuando se le trata con cariño en los fogones.
Eventos como el de ayer demuestran que la lamprea es hermosa por dentro, y sobre todo sabrosa, de ahí que tanta gente quisiera visitar Pontecesures para saborear su popular pescado, ese parásito marino que capturan catorce embarcaciones en las cuales los pescadores, conocidos como valeiros, demuestran a diario su destreza en el manejo de la nasa butrón, el arte de pesca empleada para capturar este pez de cuerpo cartilaginoso que a principios de cada año empieza a remontar el Ulla para desovar.
El ambiente festivo mejoraba por momentos, la exposición de coches antiguos hacía las delicias de los visitantes, que también contemplaban la exposición de lampreas vivas, y el sol calentaba cada vez con más fuerza, por lo que era casi imposible encontrar un sitio libre en terrazas de bares como el situado en A Plazuela.
Así lo comprobaron también las numerosas autoridades presentes en la fiesta, que recorrieron el recinto, se subieron a algún que otro coche clásico, visitaron las cocinas y, por supuesto, degustaron la lamprea.
La nutrida comitiva estaba capitaneada por la conselleira de Mar, el presidente de la Diputación, la alcaldesa de Pontecesures, María Isabel Castro Barreiro, y sus socios en el tripartito, el conservador Rafael Randulfe y el incombustible Luis Sabariz Rolán, el concejal independiente delegado de Relaciones Institucionales que, como tantas otras veces, fue el encargado de organizarlo y supervisarlo prácticamente todo.
Junto a ellos el actor gallego Tacho González, encargado de leer un pregón en el que, como no podía ser de otra manera, fue fiel a su estilo, por eso las alusiones a la lamprea y a Pontecesures rebosaban dinamismo y grandes dosis de humor.
Como se explicó anteriormente la expedición de las raciones de lamprea comenzó a las dos de la tarde. Desde prácticamente una hora antes ya había gente esperando en la cola para recoger el producto en cuanto saliera de los fogones, instalados en el mercado de abastos, como siempre.
Y también como siempre, lo que cuesta tanto trabajo pescar y requiere tantas horas de preparación en la cocina se agotó con una considerable rapidez.
«El arroz está un poco soso y la lamprea tiene demasiadas huevas», decía una de las asistentes al evento. «No hay nada como una buena ración de lamprea a la bordelesa, y ésta está deliciosa», replicaban los comensales que tenía al lado.
La satisfacción parecía generalizada y algunos incluso quisieron destacar el buen trabajo realizado por el equipo de hombres y mujeres que se ocuparon de preparar el almuerzo, de distribuirlo y de velar por el buen funcionamiento de la fiesta.

FARO DE VIGO, 19/04/10

El simbólico apoyo de Mar y el desembarco de pesos pesados.

La fiesta de la lamprea celebrada este fin de semana en Pontecesures, y sobre todo los actos desarrolados ayer, arrojan conclusiones que van más allá de las meramente referidas al aspecto culinario del evento. Puede que este certamen reuniera el mayor número de autoridades que se recuerda en una fiesta de la lamprea, pues lo habitual es que los dirigentes políticos desembarquen en acontecimientos políticos mediáticamente más populares y en localidades con mayor densidad de población. La Festa do Marisco de O Grove y la Festa do Albariño de Cambados son un buen ejemplo. Pero ayer Pontecesures recibió el respaldo de dirigentes como la conselleira do Mar, Rosa Quintana, el director xeral de Competitividade, Juan Carlos maneiro Cadillo, el delegado territorial de la Xunta, José Manuel Cores Tourís, el presidente de la Diputación, Rafael Louzán; y alcaldes como los de Valga, Portas, Padrón, Dodro y Moraña. Unos y otros arroparon a la corporación de Pontecesures (gobierno tripartito y oposición estuvieron bien representados) en la apretada agenda matinal, que culminó con un almuerzo en la carpa de degustación ubicada en el recinto portuario. Mención especial merece la presencia de Rosa Quintana y Juan Carlos Maneiro. La lamprea no depende de su departamento, pues la pesca fluvial está representada por la Consellería do Medio Rural. Pero aún así la conselleira y el director xeral quisieron desplazarse a Pontecesures para, con su presencia, apoyar a la localidad y, sobre todo, a la flota que vive de este recurso.

FARO DE VIGO, 19/04/10

La cita de la lamprea tuvo en los vehículos clásicos y de ocasión un atractivo añadido.

Los cientos de personas que acudieron a Pontecesures no lo hicieron sólo atraídos por la lamprea, sino también por la Feira do Automóvil Antigo e de Ocasión, que se clausuró ayer.
Además del centenar de vehículos expuestos o en venta en el recinto ferial, durante la jornada de ayer el evento tuvo como complemento una concentración de coches clásicos e históricos, que atrajeron las miradas de la gente en las calles centrales de la villa y en la Plazuela. Alrededor de cincuenta vehículos de muy diferentes marcas, modelos y épocas participaron en esta concentración.

Antes de la comida y por la tarde fueron los momentos en los que la feria automovilística contó con mayor afluencia de público, algunos simplemente con la intención de mirar y otros interesados en la posible adquisición de vehículos clásicos o usados a precios competitivos, o en busca de recambios y piezas de automóviles o motocicletas, que también tuvieron su espacio en la feria.

Dos clásicos de Ferrari ­ a la venta por 38.000 y 45.000 euros­, un Porsche 911 Turbo, un Lancia Fulvia de 1974 o un Beta Montecarlo de 1981 fueron algunos de los vehículos que se expusieron en los 2.500 metros cuadrados de superficie con los que contaba el recinto ferial.

DIARIO DE AROUSA, 19/04/10

Un fin de semana sobre ruedas en Pontecesures.

Concentración de Porsches

La VI Feira do Automóbil Antigo e de Ocasión arrancó ayer en Pontecesures con alrededor de un centenar de vehículos en exposición y, algunos de ellos, también en venta. Aunque el evento, que conmemora el 85 aniversario de la primera feria automovilística que se celebró en la villa en 1925, se inauguró oficialmente por la tarde, desde primeras horas de la mañana el recinto estuvo abierto al público. A partir de mediodía fue cuando comenzó a percibirse un mayor ambiente y asistencia de personas, que acudieron a contemplar los vehículos, a interesarse por ellos o en busca de recambios para coches y motocicletas.
Unos 2.500 metros cuadrados ocupan los vehículos clásicos, antiguos y de ocasión que forman parte de la feria. Los visitantes que aprovecharon la primera jornada de la feria para acercarse hasta Pontecesures pudieron admirar modelos que datan algunos de principios del siglo XX. Un Porsche 911 Turbo, un 911 GT3, un Lancia Fulvia de 1974 o un Beta Montecarlo de 1981 son algunos de los coches más llamativos. Aunque, sin duda, las estrellas de la feria son dos clásicos de Ferrari: el modelo 208 Turbo de 1982, que está a la venta por 38.000 euros, y el Dino 308 GT4 de 1974, con un precio de 45.000 euros.

Ambos pertenecen a Giuseppe Mecca, italiano afincado desde hace años en Baiona que es uno de los principales expositores. Desplazó a Pontecesures un total de 19 vehículos clásicos que fue adquiriendo a lo largo de los años en lugares tan dispares como Italia, Montevideo, Estados Unidos o Bélgica. Es campeón de Galicia de Regularidad Histórica de 2009 y subcampeón de España y en su domicilio guarda otros tantos coches, además de los que pueden verse en Pontecesures. ??A estos vehículos hay que mimarlos mucho?, comenta, ??encenderlos de vez en cuando, conectar y desconectar la batería… De vez en cuando salgo con ellos a dar un paseo y a lucirlos, que es de lo que se trata teniendo estos coches?.

Otro de los grandes atractivos de la jornada de ayer fue la concentración de cerca de cincuenta Porsches, de distintos modelos y épocas, que comenzaron a llegar a Pontecesures sobre las doce y media de la mañana entre bastante expectación del público que se encontraba en ese momento en el recinto ferial. Participaban en una ruta y sus propietarios se quedaron a comer en las carpas instaladas en la zona portuaria, por lo que los Porsches pudieron contemplarse también por la tarde.

Para hoy se espera la mayor afluencia de gente, coincidiendo con la Festa da Lamprea. Además de los stands de la feria, los visitantes tendrán ocasión de ver el medio centenar de vehículos clásicos e históricos que se concentrarán en las calles de la villa y en la Plazuela.

DIARIO DE AROUSA, 18/04/10