Ya ha pasado un año, y la ausencia de lluvias durante el invierno ha provocado una reducción del caudal del Ulla que impide disfrutar de todas las lampreas que sería deseable. Pero aún así, Pontecesures organiza una nueva edición de su fiesta exaltación del pez más preciado de un río que, por cierto, presume de ser el principal aporte fluvial de la ría de Arousa.
La XVII edición de la Festa da Lamprea do Ulla, o lo que es lo mismo, la tradicional cita gastronómica por excelencia de Pontecesures, se presenta un año más como homenaje a todos los hombres y mujeres que se dedican a la captura del preciado pez, capaz de alcanzar precios de hasta 70 euros la pieza y objeto de deseo no solo para los comensales, sino también para los mejores cocineros.
Mañana, desde las 12 horas, todos aquellos que quieran degustar este cartilaginoso pez van a tener una buena oportunidad en la zona portuaria, donde la ración va a venderse mucho más barata, a solo 5 euros.
Se trata de esa lamprea al estilo bordelesa que con su arroz y picatostes hace las delicias de los mejores paladares, y que en cualquier caso no va a estar sola en la mesa, por aquello de que pueda haber asistentes que no gusten de saborear tan preciado pez, o que anhelen algo a mayores. Así, los que quieran acudir a la cita y pretendan complementar su dieta alimenticia del día con otro tipo de productos también van a disponer de pulpo á feira y churrasco, todo ello en la carpa instalada al lado del mismo río del que en esta época del año se extrae ese alargado pez de aspecto amenazante que entre fogones adquiere matices y sabores inalcanzables por otros productos del mar o del río.
La fiesta de mañana en Pontecesures comienza temprano, a las 10 horas, con actuaciones de grupos folclóricos locales como Algueirada y Xarandeira, a lo que seguirá a mediodía, mientras empiezan a servirse las primeras raciones, la tradicional recepción de autoridades en la casa consistorial, para las 13 horas dar paso al pregón, a cargo del cocinero André Arzúa.
La devoción pagana y gastronómica se mezcla en la villa con el fervor religioso de San Lázaro
Mientras Pontecesures se llena de vecinos y visitantes dispuestos a dar cuenta de las raciones de lamprea, y mientras los fogones empiezan a calentar esas cazuelas de barro de las que sale el inconfundible aroma de este pez preparado a la bordelesa, en la iglesia parroquial de San Julián se estará celebrando otro acontecimiento de los importantes, éste de carácter religioso. Se trata de la romería de San Lázaro, el que fuera abogado de los leprosos y que lo es de todos cuantos padecen males de la piel. La devoción a este santo es muy importante en Pontecesures, donde antaño hubo una leprosería, y eso hace que miles de personas acudan a las misas programadas. Y lo hacen tanto los nativos como fieles llegados a la localidad del bajo Ulla provenientes de otros puntos de la comarca de Caldas, pero también de las de O Salnés, Barbanza, Sar e incluso Santiago.
San Lázaro ya está siendo honrado desde hace días por los creyentes que asisten a la novena. Pero esta tarde, en horario de 18 y 19 horas, comienza la parte más importante de la celebración religiosa, con sendas misas. En cualquier caso, el día grande se vive mañana, este año coincidiendo con la fiesta de la lamprea, y ambas citas son compatibles. Los que quieran asistir a alguna de las misas programadas en la iglesia de San Julián deben saber que darán comienzo a las 8, 9, 10, 11 y 12 horas, reservándose para las 13 horas la ceremonia solemne.
La devoción a San Lázaro también estará muy presente mañana a partir de las cinco de la tarde, cuando comiencen el Vía Crucis y el Rosario, a los que seguirán tres misas más, a las 18, 19 y 20 horas. Y la iglesia dista muy pocos metros del recinto habilitado para comer lamprea.
FARO DE VIGO, 24/03/12