Los valeiros capturan la primera lamprea de la temporada, vendida por 150 euros.

Es un ejemplar de 1,3 kilos pescado por Ramón Agrasar, en Pontecesures, a bordo de la lancha «Viviana» -Fue adquirido por Ángel Rodríguez para el restaurante Flavia, de Padrón.

El pontecesureño Ramón Agrasar de Villanueva, integrante del colectivo de valeiros de Pontecesures que había trabajado a diario -aunque infructuosamente- desde que hace dos semanas comenzó la temporada, fue ayer el encargado de sacar del río Ulla la primera y por ahora única lamprea del año.

Ángel Rodríguez Rodríguez, gerente de los restaurantes Flavia y Santiaguiño, así como de dos albergues, cumplió su palabra y, como había prometido al propio pescador cuando empezó la campaña, pagó 150 euros por esa pieza del primitivo, cartilaginoso y suculento pez, de aproximadamente 1,3 kilogramos de peso.

FARO DE VIGO había acompañado a Ramón Agrasar y a su esposa Tania, a bordo de la embarcación «Viviana», en la jornada de pesca del viernes. Como se explicó ayer empezaban a estar desesperados, pues la que se conoce como «dama del Ulla» seguía sin aparecer en el río, sin duda debido a su escaso caudal.

Finalmente la suerte les sonrió y ayer a media mañana levantaron la nasa butrón en cuyo interior estaba la primera pieza, y lo hicieron mientras el comprador los observaba desde el puerto, por lo que el trato se cerró de inmediato.

Fue un momento emotivo, pero sobre todo supuso un respiro para Ramón y Tania después de dos semanas de intensa faena y nulos resultados.

Ni que decir tiene que rebosaban alegría, pues capturar la primera lamprea se ha convertido en algo así como pescar el «campanu», el primer salmón de la temporada en los ríos asturianos y cántabros.

«Estuvimos todos los días al pie del cañón y empezábamos a preocuparnos, por eso ahora estamos tan felices», acertaba a explicar Ramón, un pescador de 32 años que el viernes bromeaba diciendo que nació «en el río», ya que se dedica a la pesca desde que tiene uso de razón.

Mientras recibía felicitaciones y posaba para hacerse fotos con la lamprea, su esposa y uno de sus hijos, el cual «lleva el río en la sangre», el comprador del preciado pez explicaba que va a ser elaborado en su estilo mas tradicional, a la bordelesa, en el restaurante Flavia, situado al lado del campo de fútbol del Concello de Padrón.

«Ya la tenía encargada desde el primer día de la temporada porque tengo unos clientes muy fieles y unos grandes aficionados a la lamprea que me pidieron que la consiguiera como fuera; y eso he hecho», explica Ángel Rodríguez.

Inicialmente, dado que las capturas eran inexistentes, el propietario del restaurante y sus clientes habían pactado degustar la lamprea la semana que viene. Pero los acontecimientos se precipitaron ayer con la captura del primer ejemplar, de ahí que el hostelero estudiara la posibilidad de organizar la degustación ayer mismo, como cena, o bien esta tarde, en el almuerzo.

«Estamos encantados y es para nosotros un honor poder servir la primera lamprea del Ulla de la presente temporada», presumía Ángel Rodríguez antes de felicitarse por haber tenido la suerte de presenciar esta captura en directo.

El empresario confirmó a FARO el pago de 150 euros por este primer ejemplar -es la misma cantidad que se abonó el año pasado- y mostró su deseo de que a partir de ahora la lamprea empiece a abundar, lo cual es algo que anhelan especialmente los pescadores de Pontecesures, Rianxo y Vilagarcía que integran el colectivo de los valeiros.

«Lo que me da pena es que en lugar de una sola pieza este chico no pescara tres o cuatro, pues se las habría comprado todas», resaltó Ángel Rodríguez antes de dirigirse a su restaurante.

Faro de Vigo

Premio a la constancia para el único que trabajó a diario.

Ramón Agrasar de Villanueva, a bordo de la embarcación «Viviana», en la que faena acompañado siempre por su esposa, Tania, es el único integrante del colectivo de valeiros que faenó ininterrumpidamente desde que comenzó la campaña, el día 3.

Cada mañana esta pareja levanta las nasas butrón con la esperanza de lograr las primeras capturas, pero tras limpiar los aparejos tenían que calarlos de nuevo en el agua para el día siguiente, regresando a casa con las manos vacías.

Y así un día tras otro, para desesperación de la madre de Ramón, Lola, una mujer de 64 años que dedicó más de cuatro décadas a la pesca de este pez en el Ulla y que ahora observa el trabajo de los valeiros desde el malecón.

«Ojalá mi hijo tenga suerte y pesque la primera lamprea», decía Lola el viernes, en conversación con FARO DE VIGO a pie de puerto. Y ayer por fin llegó el momento. Como si de El Gordo de la lotería de Navidad se tratara, a eso de las doce del mediodía salió del río la primera pieza, una lamprea de poco más de un kilo de peso que supone para Ramón y su esposa unos ingresos de 150 euros con los que, al menos, podrán compensar toda la gasolina gastada en su pequeña lancha durante las dos primeras e infructuosas semanas de actividad.

Faro de Vigo

El Belén de Valga cierra hasta la próxima Navidad.

El domingo 8 es el último día para ver el famoso Nacimiento.

Terminadas las Navidades toca recoger los Belenes. En los hogares, las figuras y las luces vuelven estos días a las cajas, donde permanecerán durante los próximos once meses. Y lo mismo ocurre con los grandes Nacimientos públicos que se montaron para las fiestas en Valga o Vilanova.
El de Valga cierra el domingo, 8 de enero, sus puertas. Durante la jornada, podrá visitarse entre las 12 del mediodía y las 14.00 horas, y volverá a abrir por la tarde entre las 17.00 y las 20.30 horas. La entrada es gratuita.
Se trata de una composición que está situada en el lugar de Campaña, y que ha alcanzado tal fama en los últimos años que incluso encabeza el díptico especial editado en Navidades por la Xunta de Galicia para promocionar los atractivos turísticos que había durante las fiestas en la comunidad.
El humor y el desenfado son dos de los principales ingredientes de un belén que cuenta con un buen número de piezas articuladas. Además, están hechas a mano por vecinos de la localidad, lo que le confiere un valor añadido.
No obstante, la composición destaca sobre todo porque va más allá de la representación tradicional religiosa, e incluye escenas de la actualidad política, social o cultural de los últimos meses. También hay espacios para la etnografía e incluso para la historia y la arquitectura de Valga.
También cierra el domingo 8 la exposición de «Belenes del mundo» que ha montado en la parroquia de Caleiro el sacerdote vilagarciano Gonzalo Rodríguez, que colecciona desde hace años este tipo de Nacimientos. La muestra está en el local parroquial, al lado de la iglesia, y ha sido una de las sorpresas de la Navidad en O Salnés, al congregar un gran número de visitas.
En la muestra pueden verse hasta 300 composiciones, procedentes de varios rincones del mundo, con culturas y religiones mayoritarias diferentes.

Faro de Vigo

La ausencia de precipitaciones dificulta la campaña de la lamprea en el río Ulla.

La flota todavía no ha conseguido capturas y las perspectivas no son nada halagüeñas para esta temporada -Ayer solo salió a faenar una embarcación de las 18 autorizadas.

La campaña de la lamprea no augura buenas perspectivas. La flota autorizada para explotar este recurso en el río Ulla se ha encontrado con la total ausencia de piezas desde que se inició la campaña y las previsiones, de cara a los próximos días, no son nada positivas. Así lo reconoce el presidente de los valeiros, Antonio Pesado, que ayer aseguraba que «todavía no hemos capturado un solo ejemplar».

El motivo de esta situación viene dado por la ausencia de precipitaciones de los últimos meses. Esto ha provocado que el nivel del río, a su paso por Pontecesures, haya bajado considerablemente con respecto a años anteriores y las lampreas «no han conseguido orientarse todavía al no llegar al mar el volumen suficiente de agua dulce que favorecería su llegada».

El tipo de arte que utilizan los valeiros para capturar la lamprea tampoco les favorece, ya que la nasa, muy similar a la utilizada para capturar anguilas, se deposita en el fondo y «cuando el río baja con poca agua, las lampreas que entran acostumbran a desplazarse por aguas superficiales, con lo que resulta muy complicado que acaben entrando en las nasas». Más sencillo lo tienen en el río Miño, donde está autorizada una especie de volanta que permite capturar las lampreas pese a existir un importante descenso en el volumen de agua del río. Las perspectivas también han provocado que la flota no acuda a Pontecesures. De hecho, el primer día de campaña participaron siete u ocho embarcaciones de las 18 autorizadas, una cifra que se redujo ayer hasta la cifra de un único barco. «Todos estamos esperando a que lleguen las lluvias para que el cauce del río crezca, o de lo contrario, será complicado que se registren capturas», explica Pesado.

Una situación similar a la que se está dando en este inicio de 2017, con ausencia total de capturas, es algo que no les había ocurrido a los valeiros en los últimos años, apunta Pesado.

Las 18 embarcaciones de los valeiros vieron como se abría la campaña el pasado 2 de enero, una campaña que se extenderá hasta el día 15 de abril, como ha ocurrido en los últimos años. Desde hace dos años, los valeiros cuentan con un punto de venta en el propio muelle de Pontecesures, desde el que comercializan directamente las capturas a un precio que apenas supera los 30 euros, salvo las primeras semanas, donde capturar el que algunos consideran como un auténtico manjar, puede suponer un desembolso de unos 50 euros. La venta se realiza a un precio acordado con el cliente.

La zona de captura que poseen es de poco más de un kilómetro a lo largo del Ulla a su paso por Pontecesures. Los valeiros pueden largar los aparejos tan solo en una banda del río según estimen oportuno, dejando la otra totalmente libre. La opción más utilizada es la del margen de Pontecesures, al contar con mayor presencia de rocas.

Faro de Vigo

O premio Borobó deserto: O BNG critica ao alcalde e ao concelleiro de cultura.

O enlace á páxina da Concellería de Cultura (e emprego, por suposto) segue a ser un libro en branco cuxo futuro (incerto) está por escribir; esta brancura impoluta permite facernos unha idea da importancia que ten para o señor alcalde e o seu magnífico equipo de goberno a cultura e as actividades a ela vencelladas
Resulta que no BNG chamábanos a atención o mutismo total en torno o premio xornalístico convocado na honra e memoria de Borobó. Ningún comentario, ningunha nota de prensa (co que ó noso equipo de tres lle gusta figurar, perdón, facer declaracións ós medios!!), nada de nada. Finalizado o prazo de presentación coa concurrencia dunha soa obra, agardabamos que o concelleiro de cultura, señor Cadilla, como responsable máximo da cultura do noso pobo e o alcalde, señor Seage, como capitán de tan excelso equipo de goberno, nos informaran da sorte que correra o premio.
Pero a información non chega e por eso temos que buscala a ver se nos enteramos de algo. E vaia se nos enteramos; o premio xornalístico Raimundo García Domínguez, Borobó, convocado no centenario do seu nacemento como homenaxe ó seu desempeño profesional e humano, ven de ser declarado DESERTO, dada a elevadísima participación (guiño, guiño) acadada grazas a brillante campaña de promoción e difusión pública da convocatoria levada a cabo polo equipo de goberno así como dunhas bases e prazos feitas de calquera maneira. Constatamos, de novo, que todo aquelo que non veña organizado, planificado e/ou sufragado por outras administracións convírtese un fracaso monumental nas mans da nosa #xentecapasitada
Parabéns!!

BNG de Pontecesures

La Virgen ya se mueve en el Belén artesanal de Valga.

Salvo la Santa Compaña las demás escenas del Nacimiento de Valga cambian todos los años al menos de ubicación. Este es quizás el principal secreto del éxito del Belén de Campaña, declarado de Interese Turístico Galego, y que el pasado año fue visitado por más de 40.000 personas. «Este año hay más gente», afirman los organizadores, «pero no los pudimos contar aunque estamos pensando en instalar un torno para cuantificarlos».
Combinar escenas del Misterio del nacimiento de Jesús con episodios de la más rabiosa actualidad y mezclarlas con la vida cotidiana de un pequeño pueblo como Valga en una superficie de 350 metros cuadrados parece misión difícil. Y si al 80% de las más de 4.000 figuras se les imprime movimiento y se dereza con efectos especiales «noche y día» y música, el paisaje que se crea es, sin duda, de cine.

?ste es el principal mérito del Belén Artesanal de Campaña (Valga) que abre hasta el próximo 8 de enero y que espera recibir a más de 40.000 personas, si prosigue el mismo ritmo que hasta ahora «pues hay más afluencia que en 2015 cuando contamos a los visitantes uno a uno».

A la espera de que el próximo año se instale un torno que cuente de forma automática, los organizadores del Belén de Valga saben que este año fulminarán aquel récord «pues hemos incorporado muchas novedades, incluso un Pesebre nuevo y, por primera vez, la imagen de la Virgen tiene movimiento», explica Juan García.

La renovación anual de la composición es la principal clave del éxito de esta composición navideña que cuenta con la declaración de Interese Turístico Galego.

Cierto que muchas de las figuras permanecen de forma invariable a lo largo de los años pero son muchas las que se incorporan cada año.

«Se trata de hacer un resumen de lo más importante del año e incorporarlo al conjunto», explica García. Este año se han creado composiciones relativas a los Juegos Olímpicos, a la elección de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos, el debate de los cinco principales candidatos a la Xunta de Galicia o de la diputada de Podemos, Carolina Bescansa dando el pecho a su hijo.

Pero para incluir estos nuevos elementos, la organización ha tenido que prescindir de asuntos que otros años eran actualidad. «Obviamente teníamos que retirar el accidente de Angrois o el juicio del Códice Calixtino» que tantas felicitaciones han recibido en su día.

Juan García con Antonio Castiñeiras López, José Cartiñeiras Grela o Santiago Rodríguez subrayaban el enorme trabajo que supone acertar con el espacio adecuado para cada una de las escenas.

«La Santa Compaña es la única a la que se le reserva un hueco porque es muy grande y tiene que estar en lo alto y todas las demás escenas se cambian de ubicación», asienten los organizadores.

Juan García reconoce una cierta preocupación por el futuro del Nacimiento aunque a largo plazo. «Somos treinta personas las que trabajamos desde hace 22 ediciones en la instalación del Belén pero somos los de siempre con muy poquitas incorporaciones cada año».

La construcción es muy minuciosa y compleja tanto como decir que en el edificio cuentan con dos fosos para las máquinas y al menos tres talleres de costura, carpintería y cantería pues cada pieza requiere de una delicada fabricación.

El día de Navidad se multiplican los elogios pues en ocasiones no queda ni sitio para dejar el bus.

Faro de Vigo