Primer salmón del Ulla: pesa 4,3 kilos y lo pescó Pedro, el elegido.

Un asturiano capturó en Ximonde el primer salmón de la temporada del río Ulla, de 73,5 centímetros// El afortunado también ‘encestó’ el primer reo

El río Ulla amaneció ayer caudaloso bajo un cielo nublado. Y eso, lo saben muy bien los pescadores, no es buena señal para los salmonófilos. De hecho, cuando el primer salmón de la temporada no se presenta por la mañana, muchos ya se resignan a esperar al día siguiente.

Por eso ayer sorprendió que el campanu del Ulla esperase hasta la sobremesa. La noticia era digna de haber sido anunciada con aquello de Annuntio vobis gaudium magnum: habemus campanum.

Y es que, entre la larga espera y la fumata de cigarros a pie de río, la cosa ya iba pareciendo un cónclave. Eran las cuatro de la tarde en Ximonde y quiso el destino que fuese un hombre llamado Pedro el pescador que, tras mojar sus sandalias desde las ocho de la mañana, se hiciese con las llaves del paraíso: la recompensa del primer salmón del Ulla. Pedro Pablo Méndez Vázquez, un asturiano de 47 años natural de Villacondide de Coaña, propietario de una empresa de construcción, apenas había hecho la digestión cuando un hambriento salmón de 4,322 kilos y 73,5 centímetros picaba el cebo de quisquilla y lombriz en Penedo Redondo (en la parroquia estradense de Paradela).

Pedro fue uno de los 16 elegidos… en el sorteo para poder pescar en uno de los tres tramos fluviales. Es un fiel asiduo de las aguas del Eo (donde hace doce años ya pescó un salmón de 6,800 kilos), pero ayer se estrenaba en el Ulla.

A las diez de la mañana, la suerte ya le había hecho un guiño, al pescar el primer reo, de 680 gramos y 42 centímetros. A esa misma hora se capturaba en el Narcea (Asturias) el primer campanu del año, que pesó 6,2 kilos. Su comprador pagó 10.000 euros.

Pero Pedro ya convocó a sus amigos a un cónclave gastronómico para cocinar en su casa el campanu del Ulla a la plancha.

El término campanu tiene su origen en una antigua tradición, en base a la cual la captura del primer salmón de la temporada en los ríos asturianos era celebrada haciendo repicar las campanas de las iglesias.

Cansado, pero satisfecho, Pedro paseaba ayer apoyado en su caña por la ribera del Ulla, con la emoción de quien ha sabido tener fe durante la paciente espera. Y es que, pescar un salmón, que sea el primero de la temporada y que llene la cesta… no deja de ser un milagro.

LA REIVINDICACI?N Una nueva pasarela

El director xeral de Conservación da Natureza, Ricardo García Borregón, no quiso perder la oportunidad de conocer ayer en persona la realidad de los cotos salmoneros del río Ulla. A mediodía visitó los cotos de Sinde, Couso y Ximonde y fue en este último donde los pescadores con los que conversó le plantearon una vieja reivindicación: la instalación de una nueva pasarela. Y es que esta estructura de paso fue destruida hace ya seis años con motivo de un temporal. García Borregón estuvo inspeccionando la zona y se comprometió a estudiar la petición que le formularon los pescadores.
LAS CIFRAS 50 ejemplares. Hasta que acabe la temporada el 31 de julio, el tope de salmones en los cotos de Ximonde, Couso y Sinde es de 50.

16 pescadores. El número de pescadores de salmón autorizados es de 6 en el coto de Sinde, 6 en el de Couso y 4 en el de Ximonde.

EL CORREO GALLEGO, 02/05/10

La presentación del Menú Xacobeo incluyó pimientos de Padrón «falsos».

Los cultivadores de Herbón alertan del fraude de ofrecer en abril este producto cuando aún no lo hay.

El Menú Xacobeo 2010, cocinado y presentado en Santiago el pasado 15 de abril, tenía un plato virtual: los pimientos de Padrón. Lo de «virtual» lo dicen los propios productores de la hortaliza que se cultiva en las ricas tierras de la parroquia de Herbón y su entorno ya que ni a mediados de abril ni en la actualidad se ha recogido ni un solo pimiento debido a que la cosecha de este año está atrasada por el mal tiempo. Las plantas en los invernaderos comienza a echar las primeras flores y la previsión es que los primeros pimientos de Herbón sean recolectados sobre el día 20 de este mes. Por esta razón, hablan de un «plato virtual» en el menú.
Los cultivadores lamentan que las autoridades presentes en el acto, como el conselleiro de Cultura Roberto Varela o la directora del Centro Superior de Hostelería de Galicia, Patricia Cuevas, así como altos representantes de la cocina gallega, en alusión al restaurante del Club Gastronómico Rías Altas que presentó y cocinó el menú, junto con otros socios, muestren «un descoñecemento tan grande sobre o cultivo do pemento de Herbón». Y con ello, añaden los productores, que se presten a promociones como las del Menú Xacobeo con pimientos de Padrón en la carta que en el plato no lo son, lo que contribuye a «crear confusión» sin contar que es un «engano ao consumidor, que cré que come pementos de Herbón cando non é así», explican. En este sentido, los cultivadores consideran que, por parte de los restaurantes y, en este caso también del Centro Superior de Hostelería de Galicia, no solo deben saber preparar el plato del menú sino también conocer y distinguir los productos que contiene y, sobre todo, su procedencia.
Desconocimiento en Santiago
Para las gentes de Herbón, es «lamentable» que en Santiago se desconozca por completo el hecho de que todavía no hay pimientos en el mercado. Asimismo, los productores también lamentan que desde los restaurantes y desde el Centro Superior de Hostelería de Galicia no se cuente con las sociedades agrarias de transformación Pimerbón y A Pementeira para este tipo de actos de promoción, una vez que son las dos firmas que agrupan a más del 90% de los cultivadores de pimientos de Herbón. Tanto los productores padroneses como el Consello Regulador de la Denominación de Orixe Protexida Pementos de Herbón, explican que, cuando se recolecten los primeros pimientos de la temporada hacia finales de mes, «xa se lle dará a suficiente publicidade» y más este año cuando las hortalizas de Padrón llevarán en las bolsas de comercialización la contraetiqueta de la Denominación de Origen Protegida Pementos de Herbón, la «máxima garantía» de que se está comiendo el auténtico pimiento de Herbón, señalan las personas que lo producen.
En este sentido, desde el Consello Regulador se explica que, para la total seguridad, los consumidores deben buscar los pimientos embolsados por las sociedades agrarias de transformación Pimerbón y A Pementeira.

LA VOZ DE GALICIA, 02/05/10

La parroquia de Carcacía, recupera esta año la tradicional fiesta de la tortilla.

La comisión organizadora busca apoyo económico para fabricar una sartén gigante
La parroquia de Carcacía, en el municipio de Padrón, recupera la fiesta gastronómica dedicada a la tortilla, en este caso gigante, que celebró durante 19 años pero que se interrumpió hace cuatro, pese a la fama que le dio a este lugar. La asociación cultural que integra la comisión de fiestas de la parroquia, denominada A Rabadenla, está al frente de la organización y, como siempre, los problemas y las sorpresas no se hacen de esperar.
La sartén usada para cocinar la tortilla no vale debido a que está defectuosa, por lo que la comisión se ve obligada a hacer una nueva, lo que supone un coste próximo a los 4.000 euros. Por ello, los organizadores están buscando «apoio económico» para poder organizar la fiesta, que alcanza su vigésima edición después de cuatro años sin celebrarse. Por el momento, la comisión de fiestas ya solicitó al Ayuntamiento de Padrón una colaboración económica aunque parece que con poco éxito. La empresa coruñesa Kayak Amextreme le ha regalado a la comisión un total de 16 entradas, para que las venda a un precio de 20 euros, para una bajada por el río Ulla, sin contar que un establecimiento del municipio vecino de Cesures, Comercial Moncho, le donó el material necesario para reponer los daños que sufrió la cantina de la asociación.
En cuanto a la fiesta del 17 de mayo, como siempre, la tortilla será de grandes dimensiones y, por tanto, las cantidades de ingredientes también son llamativas. En torno a 1.000 kilogramos de patatas, entre 6.000 y 8.000 huevos, 250 litros de aceite y unas 45 botellas de gas, todo al fuego desde las diez de la mañana para servir alrededor de 1.000 raciones de tortilla después de las dos de la tarde. Todo ello bajo la supervisión del maestro cocinero Jorge Verdeal, aunque para la obligada vuelta de la tortilla contará con la ayuda de una grúa de gran tonelaje.
La fiesta se celebra en el campo de Pousada, con aparcadero y carpa por si está mal tiempo, además de una pulpería para aquellos que no gusten -seguramente hay pocos- de la tortilla gigante de Carcacía, cuya primera edición se remonta al año 1987 y siempre coincide en las fechas próximas a San Isidro. La comisión eligió el día de las Letras Galegas para celebrar la fiesta este año y, con ello, no hacerla coincidir en domingo para que los comercios de Padrón, que colaboran con la iniciativa, en este caso en la edición de un libro, también puedan ir hasta Carcacía una vez que es día no laborable.

LA VOZ DE GALICIA, 25/04/10

Mil raciones de lamprea al sol.

La Feria do Automóbil hizo soñar a los amantes del motor.

Alrededor de cinco mil personas acudieron el domingo a disfrutar de los festejos en honor a este manjar del río Ulla. Buen tiempo y aforo completo

Las cifras hablan por sí solas. La Festa da Lamprea de Pontecesures levanta pasiones entre los vecinos de la comarca y visitantes que se acercan al municipio. Alrededor de mil raciones de este pez se distribuyeron el domingo en la carpa del puerto y sus alrededores. El sol pegó con fuerza y los estómagos lo agradecieron.
Se vendió todo lo que había, los pinchos, las empanadas que participaron en el concurso del sábado y el pulpo que se ofreció a aquellos que se resistieron a sucumbir a los encantos del plato estrella. Un total de 310 ejemplares de este pez distribuyeron los valeiros para los comensales que se acercaron a disfrutar de los festejos y que se estima que rondan las 5.000 personas.
La fiesta grande, la del domingo, comenzó entre motores y sentidos homenajes. La Feria do Automóbil Antiguo o de Ocasión hace cada año de esta celebración algo más que gastronomía. El acto en conmemoración de los quince alcaldes que pasaron por Pontecesures puso el toque emotivo con unos discursos que unieron partidos y ensalzaron los esfuerzos que los representantes hicieron por el municipio. La música alegró las calles y la sobremesa.
Balance
Viva o cocinada lucía la lamprea. Un acuario mostraba en movimiento a los peces y a otros ejemplares e hizo abrir la boca del susto a los más pequeños, que a pesar del miedo inicial miraban atónitos las demostraciones de un profesional. Y como en toda fiesta que se precie es un deber hacer un balance con lo bueno y lo malo de la diversidad de los actos. Al contrario que en otras ediciones, se aplaudió a la organización por esperar a que Tacho González sacase las últimas sonrisas al público con el pregón para repartir la comida. Sin embargo, se echó de menos la animación durante la tarde y la multitud abandonó el puerto quizá con ganas de un poquito más. Pontecesures volvió ayer poco a poco a la normalidad.
Cabe recordar, en un Año Santo como este, que la lamprea es un pez muy relacionado con la tradición medieval y el Camino de Santiago. De ahí el origen de la receta a la bordelesa que causó furor entre los asistentes, y que seguro hizo decir a más de uno: «El año que viene no me lo pierdo».

LA VOZ DE GALICIA, 20/04/10

Pontecesures cosecha una afluencia histórica de visitantes gracias a su fiesta de la lamprea.

La villa, que este año presume de Porto Xacobeo, celebró el evento de manera brillante

Pontecesures vivió ayer la que, quizás, puede considerarse la Festa da Lamprea más importante de su historia. Una multitud tomó la zona portuaria para consumir los 310 ejemplares disponibles de este preciado producto propio del río Ulla, pero es que, además, centenares de ciudadanos llegados de otras localidades abarrotaron las calles y diversos establecimientos hosteleros de la villa xacobea antes, durante y después de la degustación.
La soleada mañana dominical animó todavía más el certamen gastronómico, acompañado por el indudable tirón de la Feria del Automóvil Antiguo y de Ocasión, que alcanzó su sexta edición y reunió decenas de vehículos que convirtieron el centro urbano en un gran museo automovilístico.
Si a esto se suma el precio módico y popular al que se cobraron las raciones de lamprea al estilo bordelesa ??10 euros, con derecho a pan, vino y cazuela de barro de recuerdo??, la posibilidad de saborear este manjar fluvial en pinchos ??a 3 euros?? y el ambiente festivo que impregnaron los grupos de gaitas y la charanga, es fácil de entender el por qué del éxito cosechado ayer.
Desde primeras horas de la mañana el ambiente que se respiraba en la villa era ya formidable. Mucho antes de que se sirviera la lamprea (a las dos de la tarde) ya olía a churros, a churrasco y a pulpo á feira, pero también a queso, chorizos, pan recién hecho, miel, filloas y todo tipo de productos tradicionales, de esos que presumen de estar «feitos na casa», y que se vendían en diferentes puestos habilitados para la ocasión en el recinto portuario.
Hasta Pontecesures habían llegado vecinos de diversos puntos de las comarcas de O Sar, Caldas, Santiago, Pontevedra, Barbanza… por allí se veían muchas caras conocidas, como el patrón mayor de Rianxo, Baltasar Rodríguez, o el técnico de Medio Ambiente de O Grove, Francisco Meis.
Estos son sólo un par de ejemplos de que la lamprea y su fiesta pontecesureña traspasan fronteras y mejoran cada año que pasa, pero la afluencia de visitantes, llegados en algunos casos desde muy lejos, demuestra también que un pez que para algunos resulta realmente feo se convierte en un manjar cuando se le trata con cariño en los fogones.
Eventos como el de ayer demuestran que la lamprea es hermosa por dentro, y sobre todo sabrosa, de ahí que tanta gente quisiera visitar Pontecesures para saborear su popular pescado, ese parásito marino que capturan catorce embarcaciones en las cuales los pescadores, conocidos como valeiros, demuestran a diario su destreza en el manejo de la nasa butrón, el arte de pesca empleada para capturar este pez de cuerpo cartilaginoso que a principios de cada año empieza a remontar el Ulla para desovar.
El ambiente festivo mejoraba por momentos, la exposición de coches antiguos hacía las delicias de los visitantes, que también contemplaban la exposición de lampreas vivas, y el sol calentaba cada vez con más fuerza, por lo que era casi imposible encontrar un sitio libre en terrazas de bares como el situado en A Plazuela.
Así lo comprobaron también las numerosas autoridades presentes en la fiesta, que recorrieron el recinto, se subieron a algún que otro coche clásico, visitaron las cocinas y, por supuesto, degustaron la lamprea.
La nutrida comitiva estaba capitaneada por la conselleira de Mar, el presidente de la Diputación, la alcaldesa de Pontecesures, María Isabel Castro Barreiro, y sus socios en el tripartito, el conservador Rafael Randulfe y el incombustible Luis Sabariz Rolán, el concejal independiente delegado de Relaciones Institucionales que, como tantas otras veces, fue el encargado de organizarlo y supervisarlo prácticamente todo.
Junto a ellos el actor gallego Tacho González, encargado de leer un pregón en el que, como no podía ser de otra manera, fue fiel a su estilo, por eso las alusiones a la lamprea y a Pontecesures rebosaban dinamismo y grandes dosis de humor.
Como se explicó anteriormente la expedición de las raciones de lamprea comenzó a las dos de la tarde. Desde prácticamente una hora antes ya había gente esperando en la cola para recoger el producto en cuanto saliera de los fogones, instalados en el mercado de abastos, como siempre.
Y también como siempre, lo que cuesta tanto trabajo pescar y requiere tantas horas de preparación en la cocina se agotó con una considerable rapidez.
«El arroz está un poco soso y la lamprea tiene demasiadas huevas», decía una de las asistentes al evento. «No hay nada como una buena ración de lamprea a la bordelesa, y ésta está deliciosa», replicaban los comensales que tenía al lado.
La satisfacción parecía generalizada y algunos incluso quisieron destacar el buen trabajo realizado por el equipo de hombres y mujeres que se ocuparon de preparar el almuerzo, de distribuirlo y de velar por el buen funcionamiento de la fiesta.

FARO DE VIGO, 19/04/10

Pontecesures rinde su homenaje anual a la lamprea y a los vehículos clásicos.

Pontecesures inicia hoy un fin de semana plagado de actos culturales y culinarios

La lamprea del Ulla, uno de los peces más preciados de Galicia, vive su gran fiesta anual. Lo hace, como no podía ser de otra manera, en el Concello de Pontecesures, puerto base para ese colectivo de marineros (los llamados valeiros) que con ayuda de las nasas butrón se dedican a la captura de este cotizado pez cartilaginoso.
La Festa da Lamprea do Río Ulla llega a su XV edición, y lo hace de la mano de la VI Feira do Automóbil Antigo e de Ocasión. Ambas actividades se desarrollan entre hoy y mañana en la zona portuaria, donde se instalaron diferentes carpas para proteger a los comensales y visitantes en general.
El programa se abre hoy a las 10 horas con la puesta en marcha de la feria de los vehículos clásicos, cuyo acto inaugural se desarrolla a las 17.45 horas. Hasta entonces el grupo Xarandeira va a ocuparse de animar las calles pontecesureñas, en las que van a desplegarse diversas concentraciones de automóviles.
A partir de la seis de la tarde se desarrolla el concurso de empanadas elaboradas con lamprea, en el que se reparten 600 euros en premios, y de 19 a 22 horas se venden pinchos de empanada y de lamprea a la bordelesa, a un precio único de 3 euros que incluye la bebida.
El día grande por excelencia es el de la degustación de raciones a la bordelesa, mañana. La recepción de autoridades se anuncia para la una de la tarde, le sigue la ofrenda floral, en el Monumento ás Feiras do Automóvil Antigo y, a continuación, se lee el pregón, a cargo del actor y humorista Tacho González.
La fiesta gastronómica propiamente dicha comienza a las dos de la tarde, con la degustación de lamprea a un precio de 10 euros la ración, en el que se incluyen el arroz, los picatostes y el vino. Van a cocinarse, trocearse y degustarse alrededor de trescientos ejemplares de este pez tan popular en el río Ulla, incapaz de provocar la indiferencia en los paladares.
Dicen de él que apasiona o desata odios, pero también aquellos que no gusten de disfrutar de la lamprea puede empaparse de fiesta, pues no van a faltar los habituales puestos de venta de pulpo y churrasco, también en la zona portuaria.

FARO DE VIGO, 17/04/10