El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) ha reaccionado con rapidez a las quejas de los usuarios sobre la situación en la que se encuentra el apeadero de Pontecesures. La empresa pública ha colocado en las instalaciones de esa estación una serie de carteles en los que informa del comienzo inminente de las obras de reparación de las deficiencias que presenta.
Según indicaba ayer el exedil de Pontecesures, Luis Sabariz, la intención es «reparar a fondo el techo de la marquesina principal, una obra que ya ha sido adjudicada a una empresa, y se encuentra en estudio la reparación de la marquesina del andén secundario, que en la actualidad está destartalada y a punto de caer buena parte de la misma».
Además, ayer se retiraron los materiales que se desprendieron del falso techo y que cayeron sobre uno de los bancos del recinto, con la fortuna de que no había ninguna persona sentada en él en ese momento.
El exedil cesureño se ha convertido en uno de los usuarios más reivindicativos con ADIF y RENFE en Pontecesures, demandando un mejor trato para una pequeña estación de proximidad que es utilizada por muchos vecinos de la zona. El propio Sabariz fue el que denunció ante ADIF la situación en la que se encontraba el apeadero después de que ese cayese parte del falso techo del mismo. A esa queja se han sumado otras sobre el estado de la estación, como la falta de mantenimiento, algo que ha provocado más de un problema con la lluvia, al acumular humedades».
Sabariz considera que los usuarios del ferrocarril de las pequeñas ciudades y villas, como es el caso de Pontecesures, se merecen un mejor trato «y no la discriminación que muchas veces sufrimos por parte de los administradores del servicio. De hecho, extiende los problemas de esta estación a otras como Padrón o Catoira, cuyas edificaciones se encuentran llenas de pintadas, con bajantes y canalones de agua sin mantenimiento alguno, jardines abandonados, bancos dañados y otras deficiencias que «deben ser solucionadas cuanto antes». Pese a esa circunstancia, Sabariz destaca que cada vez hay más usuarios de esta línea de proximidad.
Faro de Vigo