La fiesta de la lamprea celebrada este fin de semana en Pontecesures, y sobre todo los actos desarrolados ayer, arrojan conclusiones que van más allá de las meramente referidas al aspecto culinario del evento. Puede que este certamen reuniera el mayor número de autoridades que se recuerda en una fiesta de la lamprea, pues lo habitual es que los dirigentes políticos desembarquen en acontecimientos políticos mediáticamente más populares y en localidades con mayor densidad de población. La Festa do Marisco de O Grove y la Festa do Albariño de Cambados son un buen ejemplo. Pero ayer Pontecesures recibió el respaldo de dirigentes como la conselleira do Mar, Rosa Quintana, el director xeral de Competitividade, Juan Carlos maneiro Cadillo, el delegado territorial de la Xunta, José Manuel Cores Tourís, el presidente de la Diputación, Rafael Louzán; y alcaldes como los de Valga, Portas, Padrón, Dodro y Moraña. Unos y otros arroparon a la corporación de Pontecesures (gobierno tripartito y oposición estuvieron bien representados) en la apretada agenda matinal, que culminó con un almuerzo en la carpa de degustación ubicada en el recinto portuario. Mención especial merece la presencia de Rosa Quintana y Juan Carlos Maneiro. La lamprea no depende de su departamento, pues la pesca fluvial está representada por la Consellería do Medio Rural. Pero aún así la conselleira y el director xeral quisieron desplazarse a Pontecesures para, con su presencia, apoyar a la localidad y, sobre todo, a la flota que vive de este recurso.
FARO DE VIGO, 19/04/10