Salva o Tren solicita una reunión con el nuevo conselleiro.

Son varios los frentes que presionan sobre la Administración, en este caso la estatal, titular de las infraestructuras ferroviarias, para lograr articular un sistema de proximidad en Galicia. Uno de ellos es el que mantiene vivo la plataforma Salva o Tren, cuyos representantes acaban de solicitar una entrevista con el nuevo conselleiro de Medio Ambiente, Infraestruturas e Territorio, Agustín Hernández.
El objetivo del encuentro, explica Fernando Gómez Camarero, coordinador xeral de Salva o Tren, es cerrar compromisos para, por una parte, evitar el desmantelamiento de las vías actuales cada vez que entre en funcionamiento un tramo del nuevo trazado atlántico. Y, por otra, planificar el futuro de un servicio de proximidad.
En este sentido, la plataforma, que engloba a 17 entidades, requiere al nuevo Gobierno de la Xunta que marque la fecha en la que restablecerá el servicio ferroviario en Portas. Y que ponga en marcha la medida paliativa que en enero solicitó a la ex ministra de Fomento, Magdalena Álvarez: que seis trenes inicien y finalicen su recorrido en Portas, utilizando la infraestructura existente.
Competencias para Galicia
Salva o Tren exige un tratamiento paliativo semejante para los sucesivos tramos que entren en servicio con la finalización del AVE. El objetivo es mantener en funcionamiento tramos como Vilagarcía-Santiago, Pontevedra-Portela o Pontevedra-Vigo, tanto por lo que respecta al eje atlántico como por los trayectos entre Vigo y Ourense, Santiago y Ourense, Ourense y Lugo, y Lugo y A Coruña. Paralelamente, solicita una planificación de cercanías que combine el AVE y la vía actual con nuevos trazados. Pero la idea con la que trabaja la plataforma va más allá. Así, reclama «la transferencia de competencias ferroviarias, una vez estén funcionando los servicios de cercanías, tal y como se va a realizar en Cataluña, y la creación de un ente gestor ferroviario gallego».

LA VOZ DE GALICIA, 19/05/09

Fegaclasic reunió más de 300 vehículos antiguos.

La organización espera contar con la ayuda del Concello de Pontecesures el próximo año.

Fegaclasic cerró ayer sus puertas en Pontecesures después de reunir a más de 300 vehículos antiguos en las instalaciones del muelle. Aunque se define «inimigo de dar cifras», Antonio Ferro, miembro de la organización, realizó un «balance moi positivo» del evento y subrayó que, si el tiempo acompañase, la afluencia de público podría ser mucho mayor.
«Foi impresionante e co tempo a favor sería moito melloe», manifestó el portavoz de la asociación cultural Mirándolle os Dentes, que se encargó de organizar la tercera edición del evento. Par la cuarta, que esperan celebrar en estas mismas fechas para el año que viene, «esperamos contar coa colaboración do concello de Pontecesures», ya que «cremos que o nome de Cesures debe ser coñecido en toda España a través da súa historia». Pero eso sí, la colaboración municipal deberá de ser «a través da liña que cremos oportuna. Pola nosa banda non vai haber problema», apuntó.
Aunque no hay cifras oficiales en cuanto a asistencia sí se contabilizaron los vehículos participantes, más de 300. «Houbo 220 coches e 94 moto, aparte de bicicletas, camións, autobuses, tractores, coches de bombeiros…»
Entre ellos destaaron el PO-2, uno de los primeros a gasolina que circuló por Galicia y que fue cedido por Manuel y Javier Pazó Olmedo; un C% de 1925 o un Rolls Royce que fue porpiedad de la Reina de Inglaterra. Tuvo también mucho éxito la muestra de vehículos de bomberos (el más antiguo databa de 1912) y el monográfico Seat, que reunió 24 modelos diferentes.

DIARIO DE PONTEVEDRA, 18/05/09

Los trabajadores se movilizan para exigir la continuidad de Novo y Sierra.

La empresa valguense anunció un expediente de regulación que podría dejar en la calle a 36 empleados

A escasos kilómetros de Cedonosa el fantasma del paro se cierne de nuevo contra la totalidad de una plantilla del Baixo Ulla. La última firma acuciada por la crisis económica es Novo y Sierra, una empresa de construcción de ladrillos que en los 120 años que lleva en activo superó muchas crisis económicas, pero que ahora amenaza con echar el cierre y dejar en la calle a 36 trabajadores; algunos, llevan una treintena de años trabajando para la empresa.
Según indicaron ayer los trabajadores y sus representantes sindicales, que se reunieron al mediodía delante de la fábrica para manifestar su oposición total al cierre, la dirección de la empresa presentó ante el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Pontevedra un expediente de regulación de empleo que afectaría a la totalidad de la plantilla, así como la solicitud de cese total de la actividad, lo que supondría la desaparición de la firma.
Con pancartas en las que se leían lemas como «Queremos traballo, non o despido» y «Pola continuidade de Novo y Sierra, postos de traballo si, despidos non», los trabajadores se concentraron ayer en protesta de la pretensión de los empresarios. Por supuesto, no niegan que la firma está pasando por un mal momento, pero también creen que la situación no es tan dramática como para que el barco se tenga que hundir obligatoriamente. «Non é unha situación insalvable -dijo ayer Juan Fajardo, de CC.OO.-; pensamos que hai traballo e que se poden plantexar outras posibilidades, como un ERE temporal». Una opinión que comparte Rafael Iglesias, secretario comarcal de la CIG, quien reconoce que la firma tiene ahora mismo una deuda de un millón de euros, pero que no es como para cerrar. A entender de los sindicatos, ni la situación financiera ni las deudas con Hacienda lo justifican.
Especulación o venta
Lógicamente, una fábrica que depende por completo de la construcción está pasando por momentos difíciles, pero de momento sigue habiendo actividad, y aunque trabajadores y representantes sindicales reconocen que es necesario llevar a cabo algunos ajustes, también sospechan que la intención de cerrar sin más, sin plantearse otras alternativas, podría venir derivada de que la firma aprovecha la mala situación económica para cerrar sus puertas, «e unha decisión dese tipo non se toma sen ter en conta aos traballadores, que tamén forman parte da empresa e viven dela -aclaró Fajardo-. Sospeitamos que pode haber algunha operación especulativa ou que teñen intención de vender a fábrica».
En todo caso, la intención de la empresa se podrá saber en los próximos días, cuando a los delegados sindicales les llegue la notificación judicial y la oferta de la firma, que en principio pasaría por emprender un expediente de regulación de empleno que afectaría a la totalidad de la plantilla.
Pero los sindicatos ya avisan de que no se quedarán de brazos cruzados, y que la de ayer es solo la primera de las movilizaciones que piensan emprender en contra del cierre. Rafael Iglesias ya lo advirtió: «Que non veñan aproveitando a situación para dar 20 días de soldo por ano traballado, porque nós imos esixir os 45 días».
Ocho EREs en la comarca
Como indicaron los sindicatos hace solo dos semanas, coincidiendo con la Festa do Traballo del 1 de mayo, en la comarca hay en la actualidad ocho expedientes de regulación de empleo en marcha, aunque dos no fueron aceptados por la Administración, así como 10.500 trabajdores que se han quedado en la calle, lo que supone un 40,2% más que en las mismas fechas del año anterior.

LA VOZ DE GALICIA, 17/05/09

Os sindicatos sospeitan que o peche de «Novo y Sierra» podería agochar a venda da empresa.

Os trinta e seis traballadores da empresa ??Novo y Sierra? de Valga concentráronse onte ás portas da fábrica de ladrillo en contra do expediente de regulación de emprego (ERE) presentado polos propietarios da compañía ante o xulgado do Mercantil e a través do cal pretenden despedir a toda a plantilla para cesar por completo a actividade produtiva algo que, de facto, xa se produciu, posto que hai días que xa non se fabrica ningún material na factoría de A Torre (Campaña).
Con camisetas co lema ??Non ao despido, si ao emprego?, os traballadores denunciaron a situación na que os deixa a decisión da empresa de botar o peche, que significará, máis pronto que tarde, 36 novos parados no municipio. A plantilla contou co respaldo, na concentración de onte, de representantes dos sindicatos CIG e Comisións Obreiras. Botaron man de pancartas con frases como ??Pola continuidade de Novo y Sierra? ou ??Queremos traballo, non aos despidos? para facer partícipes da súa protesta aos condutores dos vehículos que circulaban por Campaña. Tamén houbo berros: ??Novo y Sierra solución?, ??A nosa xente non quere un expediente? ou ??Queremos traballar e non mendigar? foron algunhas das consignas que corearon.

??Novo y Sierra?, propiedade de dúas familias de Pontecesures, solicitou no Xulgado Mercantil número 2 de Pontevedra o cese total de actividade, que está pendente de ser admitido ou non. Ademais presentou un ERE para rescindir os contratos dos 36 traballadores e agárdase que esta semana comecen as negociacións entre empresarios, administradores concursais e sindicatos para tratar de chegar a un acordo sobre as indemnizacións que percibirán os traballadores en caso de que finalmente se confirmen os despidos.

Damnificados > Tanto a CIG como CCOO sosteñen que os donos da empresa non teñen outro intese que ??salvagardar o seu patrimonio a costa dos traballadores, que son os grandes damnificados?, apunta Juan Fajardo, de Comisións. Sospeitan que tras este cese de actividade pode agocharse un intento de vender a compañía a outra empresa do sector, ??desvincularse así dos empregados, que teñen unha antigüidade media de 20 anos, e volver a reabrir a fábrica con menos cargas?. Se isto chegara a suceder e a factoría reabre, advirten que ??imos poñer todo o empeño en que os traballadores sexan os mesmos?.

A débeda que acumula a empresa, uns 2,5 millóns de euros, ??non é como para pechar?, cren os sindicalistas, que ademais denuncian que, nos últimos tempos, os seus responsables ??espantaron clientes e deriváronos a outras compañías do sector que son acreedores de ??Novo y Sierra?, ademais de pechar vías de negocio e restrinxir a súa produción exclusivamente ao ladrillo?, algo que Rafael Iglesias, da CIG, interpreta como un signo de que os donos xa non apostaban polo futuro da factoría.

As críticas sindicais diríxense aos directivos de ??Novo y Sierra?, aos que califican de ??insolidarios. Durante anos tiveron beneficios e agora, ás primeiras mal dadas, pagan os pratos rotos os traballadores?, comenta Juan Fajardo, que anuncia novos actos de protesta nas vindeiras semanas.

DIARIO DE AROUSA, 17/05/09

Novo y Sierra cesa la actividad en su fábrica y presenta un ERE para despedir a toda la plantilla.

Fábrica de la empresa Novo y Sierra, situada en el lugar de A Torre, en la parroquia valguesa de Campaña.

La crisis económica y el parón de la construcción se cobran una nueva víctima entre las empresas de la comarca del Ulla-Umia. La compañía Novo y Sierra pretende cesar su actividad productiva en la fábrica de Campaña (Valga) y para ello ha presentado en el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Pontevedra y expediente de regulación de empleo (ERE) para rescindir el contrato a la totalidad de la plantilla, que llega a casi cuarenta trabajadores que ven como, casi con total probabilidad, se quedarán en la calle. Para denunciar la situación los empleados y representantes sindicales de Comisiones Obreras y la CIG se concentrarán esta mañana ante las instalaciones de la fábrica, en el lugar de A Torre.

La empresa Novo y Sierra, radicada en Campaña (Valga) inició un proceso para su liquidación y solicitó en el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Pontevedra el cese total de su actividad productiva, una medida que ha acompañado por un expediente de regulación de empleo (ERE) a través del cual pretende rescindir el contrato a toda la plantilla, formada actualmente por unos treinta y seis trabajadores que se ven amenazados con el despido y con acabar en el paro. Los empleados, en un intento por denunciar la situación que se les viene encima, convocaron para hoy una concentración ante las puertas de la fábrica, en el lugar de A Torre. En este acto de protesta estarán acompañados por representantes de los sindicatos Comisiones Obreras y CIG.
La situación económica de la empresa de cerámica empeoró notablemente en el último año, debido a la crisis económica generalizada y, muy especialmente, al parón experimentado por el sector de la construcción, al que dirige sus productos. El mal estado de sus finanzas provocó que, en marzo de 2009, presentase en el Juzgado de lo Mercantil pontevedrés la documentación para solicitar un concurso de acreedores ­también conocido como suspensión de pagos­, una medida que inicialmente fue entendida por los sindicatos y la plantilla como un intento por salir de la crisis, acomodarse a la situación del mercado de la construcción y reducir su plantilla para ajustarse a sus necesidades productivas ya que el número de pedidos había sufrido un notable bajón.

El juzgado admitió la suspensión de pagos y nombró a los administradores concursales para hacerse cargo de la gestión de la empresa, pero la sorpresa llegó cuando, apenas dos meses después, decidieron liquidar la compañía y anunció la rescisión de los contratos de todos sus empleados, que estuvieron durante varias semanas de vacaciones. Tras su regreso apenas tienen trabajo que acometer, debido a la paralización de la producción, y se dedican a realizar trabajos de mantenimiento o limpieza.

La deuda que acumula la compañía de fabricación de ladrillo y otros productos cerámicos podría llegar a los 2,5 millones de euros, aunque los sindicatos consideran que la situación podría reconducirse de manera que la empresa volviera a ser viable.

En la última semana se sucedieron las reuniones entre sindicatos, trabajadores y directivos de Novo y Sierra para tratar de buscar alternativas al cierre de la fábrica. En una de ellas participó también el alcalde, José María Bello Maneiro, aunque parece que finalmente estos encuentros no han dado frutos y la dirección de la empresa mantiene su intención de liquidar la compañía y poner así punto y final a sus 134 años de historia. Novo y Sierra se creó en 1875 como almacén de coloniales y posteriormente diversificó su actividad. Fue en las primeras décadas del siglo XX cuando adquirió una ??telleira? en la zona y comenzó a fabricar materiales cerámicos y de construcción.

DIARIO DE AROUSA, 16/05/09