En su recorrido por la línea que unía Carril con Santiago de Compostela, la primera de Galicia, los vagones guardan pequeñas historias. Desde ayer, el libro Historias do Carril-Cornes saca a la luz 24 de esas historias en forma de relato gracias a la pluma de Xoán Luís Miguéns, socio fundador de la Asociación Compostelá de Amigos do Ferrocarril.
Se trata, sobre todo, de recuerdos de aquellos que alguna vez se subieron al tren que unía la capital de Galicia con la ría de Arousa. A través de anécdotas como las primeras veces que se iba a la playa en el ferrocarril, el traslado de los restos de Rosalía de Castro desde Iria Flavia hasta el Panteón de Galegos Ilustres de Bonaval o el contrabando escondido en el convoy, se consigue dar una fiel imagen de la sociedad gallega de la época.
«Son historias sinxelas sobre xentes tamén sinxelas que reflicten certos feitos característicos das distintas épocas nas que se encadran estes relatos», explica el autor, para después añadir que «a través deles podemos albiscar como se desenvolvía o mundo ferroviario galego na sociedade do derradeiro terzo do XIX e boa parte do XX».
Y no solo a través de la palabra escrita se ofrecerá el análisis de la sociedad de aquellos años. También se incluyen fotografías y grabados de la época.
LA VOZ DE GALICIA, 29/10/09