El río Ulla en Herbón acogerá un campeonato estatal de piragüismo.

El alcalde de Padrón, Camilo Forján, acaba de reunirse en el Concello con representantes de la Federación Galega de Piragüismo, entre los que estaba el vicepresidente Enrique Portela, además de Ramón Loira y Luis Fernández, para tratar asuntos relacionados con la celebración en fechas próximas de la prueba Copa de España de Slalom, que se realizará en el río Ulla a su paso por la zona de Lapido.
Así, hablaron de la colaboración que podría prestar el Ayuntamiento padronés, además de la posibilidad de crear un campo de slalom permanente en el Ulla, en la zona del Lapido, «dadas as magníficas características que presenta o río nesta zona para a práctica do piragüismo», según explica el alcalde Camilo Forján.
En fechas próximas habrá una nueva reunión entre ambas partes para concretar actuaciones y la colaboración del Ayuntamiento en la organización y desarrollo de dicha prueba nacional de piragüismo.

LA VOZ DE GALICIA, 25/04/10

Cesures recuerda a sus alcaldes.

El Ayuntamiento pontevedrés de Pontecesures rindió homenaje a los quince alcaldes que gobernaron en el municipio a lo largo de su historia. La cita tuvo lugar en el marco de la XV Festa da Lamprea. El acto de homenaje se desarrolló en la casa consitorial, presidido por la actual regidora, Maribel Castro, su antecesor, Manuel Luis Álvarez Angueira (los dos únicos alcaldes vivos), y al que también asistió el presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, y el delegado de la Xunta en la provincia, Manuel Cores Tourís.

En el concello cesureño se procedió al descubrimiento de fotos de los antiguos regidores, con presencia de los familiares de algunos de ellos. El Ayuntamiento de Pontecesures se fundó en el año 1925. El homenaje abrió los actos de la cita gastronómica que reunió a miles de personas en la localidad con la dama del río Ulla como gran protagonista.

Vida Social Gallega. EL CORREO GALLEGO, 25/04/10

La padronesa Sara, nueva top model de Área Central: «el mundo de la moda no me asusta en este momento».

Sara, que está en el instituto y los fines de semana trabaja en una tienda de complementos de moda, asegura que su sueño es ser modelo y confiesa que entrar en ese mundo no la asusta «en este momento». Era la primera que desfilaba y estaba feliz y muy contenta de que su imagen se verá en marquesinas y anuncios, en todas partes.

LA VOZ DE GALICIA, 25/04/10

La parroquia de Carcacía, recupera esta año la tradicional fiesta de la tortilla.

La comisión organizadora busca apoyo económico para fabricar una sartén gigante
La parroquia de Carcacía, en el municipio de Padrón, recupera la fiesta gastronómica dedicada a la tortilla, en este caso gigante, que celebró durante 19 años pero que se interrumpió hace cuatro, pese a la fama que le dio a este lugar. La asociación cultural que integra la comisión de fiestas de la parroquia, denominada A Rabadenla, está al frente de la organización y, como siempre, los problemas y las sorpresas no se hacen de esperar.
La sartén usada para cocinar la tortilla no vale debido a que está defectuosa, por lo que la comisión se ve obligada a hacer una nueva, lo que supone un coste próximo a los 4.000 euros. Por ello, los organizadores están buscando «apoio económico» para poder organizar la fiesta, que alcanza su vigésima edición después de cuatro años sin celebrarse. Por el momento, la comisión de fiestas ya solicitó al Ayuntamiento de Padrón una colaboración económica aunque parece que con poco éxito. La empresa coruñesa Kayak Amextreme le ha regalado a la comisión un total de 16 entradas, para que las venda a un precio de 20 euros, para una bajada por el río Ulla, sin contar que un establecimiento del municipio vecino de Cesures, Comercial Moncho, le donó el material necesario para reponer los daños que sufrió la cantina de la asociación.
En cuanto a la fiesta del 17 de mayo, como siempre, la tortilla será de grandes dimensiones y, por tanto, las cantidades de ingredientes también son llamativas. En torno a 1.000 kilogramos de patatas, entre 6.000 y 8.000 huevos, 250 litros de aceite y unas 45 botellas de gas, todo al fuego desde las diez de la mañana para servir alrededor de 1.000 raciones de tortilla después de las dos de la tarde. Todo ello bajo la supervisión del maestro cocinero Jorge Verdeal, aunque para la obligada vuelta de la tortilla contará con la ayuda de una grúa de gran tonelaje.
La fiesta se celebra en el campo de Pousada, con aparcadero y carpa por si está mal tiempo, además de una pulpería para aquellos que no gusten -seguramente hay pocos- de la tortilla gigante de Carcacía, cuya primera edición se remonta al año 1987 y siempre coincide en las fechas próximas a San Isidro. La comisión eligió el día de las Letras Galegas para celebrar la fiesta este año y, con ello, no hacerla coincidir en domingo para que los comercios de Padrón, que colaboran con la iniciativa, en este caso en la edición de un libro, también puedan ir hasta Carcacía una vez que es día no laborable.

LA VOZ DE GALICIA, 25/04/10

Marcos Jamardo: «Soy entrenador de fútbol base para sacar a los niños cesureños de la calle».

Lleva más de una década enseñando las técnicas de este deporte a jóvenes de 5 a 16 años. Afirma que su objetivo es hacer buenas personas antes que futbolistas de élite

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Aficionados al fútbol hay muchos, forofos conscientes de los valores que surgen tras disputar un once contra once muy pocos. Marcos Jamardo es uno de los que saben que el trabajo en equipo, la competitividad y el saber perder son nociones importantes que deben aprender los jóvenes a los que enseña antes de que se aten las botas. Por eso, cuando los niños van llegando uno a uno al campo, se asegura diariamente de que sus deberes están hechos y sus mentes libres de problemas.
En las instalaciones del campo municipal de Pontecesures hay más que porterías, hierba artificial y máquinas de gimnasio. En una acogedora sala está «el sofá de las confesiones». El entrenador cesureño sabe de buena mano que los jóvenes a los que instruye están, en la mayoría de los casos, en edades complicadas y que a veces además de un monitor deportivo necesitan un amigo.
Marcos entiende que los padres le encomiendan a sus hijos no solo para que pasen el rato sino para que también aprendan otros valores del deporte y el compañerismo mientras están entretenidos. Además sabe apreciar como desarrollan muchos el don de darle al balón con arte: «Si después de tener la cabeza amueblada observo que entre los jóvenes hay alguna promesa de este mundo, trato de buscarle una salida en algún equipo profesional. Me enorgullece ver como algunos de mis chavales han llegado lejos. Pero lo primero es lo primero», asegura.
Mucha paciencia e ilusión
Lleva más de una década dedicándose a lo mismo sin contar con ningún sueldo a mayores del que le aporta el Concello. Estudió para ser monitor deportivo porque el fútbol era su pasión y porque su objetivo principal es sacar a los chicos de Pontecesures de la calle: «Mientras están aquí jugando y divirtiéndose en el campo no están en la calle tirados»., manifiesta.
Asegura que el sueldo que gana en los entrenamientos le llega para vivir y para llegar a casa satisfecho con el trabajo realizado. Día a día los niños aprenden más que fútbol con su esfuerzo. «Me llega con que se rían mucho y aprendan un poco de técnica. Lo que agota no es dar instrucciones a base de silbato sino hacer aprender a niños y adolescentes que si se pierde no se acaba el mundo y que la victoria se consigue si todos ponen de su parte y forman una piña».
En los últimos años las categorías más bajas están cosechando éxitos, pero Marcos sabe que además del buen juego la afición es muy importante para que sus chicos se sientan apoyados: «A veces no basta con que los padres vengan a ver a los niños. Para que este club pueda crecer necesitamos el compromiso vecinal y que haya ganas porque el Pontecesures vuelva a ser lo que era. Ya contamos con el apoyo de los promotores y tenemos unas instalaciones dignas de ver y disfrutar. Solo nos falta un empujoncito más para poder llevar a este club donde se merece», asegura. Y es que en los rincones de las salas anexas al campo se reparten las estanterías con trofeos que en su mayoría cosechó el Club Ulla S.D y los que menos los nuevos equipos que entrena.
Un nuevo equipo federado
Cuando se le pregunta cual es la causa de que Pontecesures no cuente con un equipo federado, Marcos responde que hubo tiempos malos pero que con el nuevo campo y con las ganas de los pequeños pronto se podrá volver a contar con una agrupación de nivel: «Hubo un tiempo en el que el fútbol se murió en el municipio, no había un compromiso palpable por sacar el equipo adelante. Ahora las cosas empiezan a cambiar y cada vez son más los jóvenes interesados en volver a hacer a Pontecesures una referencia del fútbol en la comarca», dice.
Tanta pasión por este deporte tenía que venir de familia. El padre de Marcos recorrió algunos equipo gallegos y pasó el testigo a su hijo, que jugó por todas las categorías del Club Ulla S.D, y por los equipos de Cambados, Ribeira, Vilagarcía y Compostela.
Aunque todavía ronda los 30 años el entrenador cesureño se siente como un padre para muchos de los deportistas que ha visto crecer y de los que recuerda exactamente nombre y apellidos, calidad de juego y calidad humana. Varias fotos de equipo cuelgan de la pared del gimnasio y Marcos señala a sus jugadores con nostalgia y no puede evitar decir, al pensar que ya son hombres, aquello de «como pasa el tiempo».
En los últimos días el fútbol está en la boca de todos. La liga está reñida y madridistas y culés sufren en el campo de Pontecesures como si en cada gol estuviera una victoria de su equipo: «Durante este último mes nos dividimos en dos equipos para organizar partidos: a un lado los madridistas y a otro los barcelonistas. Los niños se lo pasan genial corriendo por la banda y chutando como si fueran Messi o Cristiano Ronaldo». El monitor de Cesures bromea pero sabe que en cualquier momento puede brillar entre sus chavales una nueva promesa de este deporte.

LA VOZ DE GALICIA, 24/04/10