Cesures y Valga piden ayuda a la Xunta para lograr contener sus ríos y regatos
Valga amanecía ayer con resaca después de que muchos de sus vecinos, voluntarios, Policía y operarios municipales estuvieran hasta las cinco de la mañana achicando agua en la mayor parte del municipio, especialmente en las parroquias de Cordeiro y Campaña, las más afectadas por las inundaciones debido a los ríos Valga y Louro. Este último continuaba ayer desbordado y provocaba problemas en varios viales de Casanova y Forno, aunque sólo permaneció cortada la Rúa Nova. El resto de carreteras habían recuperado la normalidad a lo largo de la noche.
El alcalde, José María Bello Maneiro, realizó un recorrido por las zonas más afectadas y, junto con la Policía Local, evaluaron el estado en el que se encontraban los puentes y viales de la localidad ante la posibilidad de que alguno pudiera ceder o deteriorarse debido a la fuerza con la que bajaba el agua. Además, palas, camiones, tractores y población en general se afanaban en limpiar los lodazales en los que quedaron convertidas muchas zonas y viviendas, sobre todo en Devesa y Souto, donde los inmuebles resultaron especialmente afectados.
El regidor pretende que la Xunta acometa con la mayor urgencia las obras de ensanche del regato de Devesa y también del río Louro para evitar que situaciones como estas vuelvan a repetirse. La primera de las actuaciones estaba proyectada dentro de las obras para evitar inundaciones que se ejecutaron en los últimos años en el municipio, pero que en esta ocasión sirvieron para poco. Sin embargo Medio Ambiente sigue sin realizar el ensanche del riachuelo, cuya capacidad es insuficiente para grandes caudales de agua. Maneiro mantuvo una reunión la pasada semana con el conselleiro e «compremeteuse a mandar a técnicos para estudiar as actuacións que habería que facer, pero de momento aquí non veu ninguén».
No es este el único alcalde que plantea exigencias a la Xunta de Galicia, sino que el cesureño Manuel Luis Álvarez Angueira mantuvo ayer contactos con varios departamentos autonómicos, a los que pidió ayuda para lograr contener los regatos del municipio, cuyo desbordamiento provocó el lunes riadas en la zona de Redondo y también en el casco urbano, cuyos accesos quedaron totalmente cortados durante toda la tarde, ya que las calles se habían convertido en un inmenso río. El regidor explica que estos regatos se encuentran en casos «atorados» por los escombros bajados desde el monte, mientras que las tuberías de otros son de escasa sección por lo que sería recomendable sustituirlas. Sin embargo «o Concello non pode afrontar estes gastos con recursos propios porque estamos a falar de moitos cartos», por lo que reclama soluciones «urxentes» a la Medio Ambiente, Medio Rural, Obras Públicas o Augas de Galicia.
:: Diario de Arousa :: M. Angueira
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