Los hermanos Romero del Náutico de Pontecesures, bronce.
El piragüismo arousano sumó ayer un nuevo palista internacional esta temporada. O más bien dos. En la prueba de C-1 Sénior de la II Copa de España de Maratón, selectiva y convertida en las aguas del río Lérez en un pulso entre dos compañeros de equipo -Breogán- y hasta hace bien poco pareja de proyecto olímpico en el C-2 1.000. Con Diego Romero haciendo buena su superioridad como esprinter de la media distancia en aguas tranquilas para imponerse en un final de infarto a un sobre el papel maratoniano más puro como Tono Campos, con palmarés y potencia para convertirse más pronto que tarde en el canoísta español más laureado de la historia a nivel internacional en el piragüismo de fondo.
Una hora, 54 minutos y 54 segundos marcó Diego Romero en la línea de meta; 1.54.55 Tono Campos. A un mundo, 2.02.19, llegaba Pedro Areal, del Piragüismo Pamplona. El vilagarciano se ganaba de este modo el derecho a participar en el próximo Campeonato de Europa de Maratón, del 5 al 8 de julio en Croacia, en el restringido grupo de palistas a los que la Real Federación Española de Piragüismo cubrirá los gastos de defender sus colores en una gran cita internacional. Como segundo, Campos tendrá derecho en principio a acudir también a Croacia, solo que pagándoselo de su bolsillo. A no ser que hoy consiga ganar el C-2 de la II Copa de España de Maratón junto al también breoganista José Manuel Sánchez, con Romero y desde hoy su también compañero de club y figura mundial de la canoa doble de fondo, ?scar Graña, como principales rivales de partida en una última jornada dedicada a los barcos júniores y séniores de parejas.
El sábado dejó además el bronce del meisino del Club Naval de Pontevedra, Iago Monteagudo, en el K-1 Sub-23. Lejos del oro y la plaza continental sufragada por la RFEP, ganada por Aarón Diéguez (K. Tudense) en 1.44.15, pero peleando la segunda a Alberto Plaza (P. Cangas), con 1.45.11 por 1.45.16.
Los canoístas cadetes del Náutico Pontecesures Iria Romero, en C-1, y su hermano Iago junto a Alfonso Álvarez, en C-2, se colgaron sendos bronces en el Lérez.
La Voz de Galicia
0 comentarios