Vecinos de Dodro denuncian que las caravanas de la Pascua continúan en el mismo lugar.

Vecinos de la zona de A Devesa, en Dodro, en las inmediaciones del río Sar, expresaron ayer su «malestar» debido a que, pese a que casi pasaron dos semanas desde que concluyeron las fiestas de la Pascua de Padrón, aún hay caravanas y camiones estacionadas en el lugar a pesar de que, según recordaron, el Concello padronés se comprometió a «deixar libre e limpa a zona antes do día 23 de abril».
Los vecinos explican que los dueños de las caravanas fueron a la feria del San Marcos de Noia y dejaron allí los vehículos estacionados, «coas molestias que ocasionan» entre las que mencionan, por ejemplo, que las lavadoras vierten el agua sucia a la propia calzada. «Isto é unha asquerosidade total», aseguran los afectados quienes, además, recuerdan que fueron en varias ocasiones al Concello de Dodro a protestar por la situación pero que el gobierno no les hace caso. En este sentido, también acusan a Padrón de «pasar olímpicamente de todo».
Estos vecinos también mostraron su «desacordo» con las declaraciones realizadas por el alcalde de Dodro Arturo Díaz en el pleno del viernes, en respuesta a una pregunta formulada por el PP. Díaz aseguró que «agradecemos a invasión das caravanas» y que se siente «orgulloso» de que los vecinos participen en las fiestas. El alcalde añadió que seguirá apoyando la instalación de las caravanas siempre que no causen «graves molestias».

LA VOZ DE GALICIA, 30/04/09

Las humedades de un ático nuevo en Padrón desesperan a los propietarios.

La familia estrenó el piso hace menos de un año y ya desea abandonarlo debido a los problemas que tiene

Hace solo unos meses que el matrimonio formado por Alejandro Castro Rodríguez, de 56 años, y María José Estévez González, de 55 años, viven en su nuevo piso de Padrón, concretamente un ático del edificio Campo de A Barca, pero el tiempo fue suficiente para que hablen de que están hartos de vivir en él. Cuando lo compraron, en agosto de 2007 y en construcción, a María José le enamoró la claridad que iba a tener en un espacio en concreto, la cocina, después de vivir en un piso del centro de Padrón en el que dicha estancia daba al patio de luces.
Pero fue empezar a llover en enero y, con ello, comenzar el calvario de esta familia que asegura que «non podemos ter nada» en su casa, en alusión a que se le estropea debido a la humedad. O más que eso. En el salón, las grietas en las paredes, la pintura descolorida e incluso caída, así como un agujero a la altura del radiador, evidencian las deficiencias de la estancia, que los propios inquilinos atribuyen a un posible defecto en el tejado. «Cando chove moito, a auga corre pola parede abaixo e chega a facer un charco no medio do salón, como se fora na rúa». Por este motivo, al matrimonio ya se le estropeó el sofá.
Mención especial merece para ellos el gran ventanal por el que entra la luz que tanto le gustó a la mujer. En la parte superior de la estructura de aluminio, se pueden ver la marcas que evidencian que el agua corrió por la ventana abajo. «? unha vergoña», dice la propietaria quien asegura que tiene miedo de que la ventana se le venga abajo. Habla de que avisó en varias ocasiones al constructor para que le revisara las deficiencias y las subsanara, aunque sin éxito hasta hoy. Desesperada, la familia decidió acudir a la prensa ya que se pasó el invierno resfriada debido a la humedad que ni siquiera la calefacción es capaz de disimular, pese a que un mes pagaron casi 300 euros de consumo. «Así non podemos seguir», explica la titular del piso, quien se planteó dejar de pagar la hipoteca y abandonar su casa casi recién estrenada.
El problema de humedades que tiene esta vivienda, según denuncian sus inquilinos, podría extenderse a otras zonas del edificio. El presidente de la comunidad de vecinos remitió con fecha 1 de diciembre de 2008 una queja a la Consellería de Vivenda en la que exponía una serie de deficiencias, entre ellas «humidades internas». Asimismo, la comunidad contrató a un técnico que ya realizó un informe pericial de las deficiencias en la zonas comunes y ahora está pendiente de que inspeccione aquellas viviendas que así lo solicitaron. Además, el propietario de otro de los áticos también dirigió una reclamación al Instituto Galego de Consumo.

LA VOZ DE GALICIA, 30/04/09

El constructor dice que no tiene constancia de las deficiencias.

La versión de los propietarios del ático y del propio presidente de la comunidad contrasta con lo que afirma el constructor del edificio Campo de A Barca. Este aseguró a este periódico que no tiene «constancia» de las deficiencias que denuncian los propietarios del ático y que, de aquellas que sí le constan, hizo las reparaciones oportunas. «Se a xente cala a boca ou vai a prensa, eu non me entero», dice el constructor quien cree que «se hai algún defecto nalgunha vivenda hai medios e formas de falar co constructor».
También recuerda que lleva muchas obras hechas tanto en Padrón como en otros puntos y que procura siempre que los clientes queden contentos. «Se hai unha equivocación, vaise a vivenda e repárase sen problema ningún». El constructor concluye que «levamos 30 anos facendo obras, non empezamos hoxe, e sempre traballamos para que os clientes queden contentos». No obstante, este no es el caso de Alejandro y María José quienes aseguran una y otra vez que dieron parte de las deficiencias al constructor y que incluso fue un trabajador a verlas, pero que «non fixo nada».

LA VOZ DE GALICIA, 30/04/09

Alumnos del Xulián Magariños podrán participar en un “rafting” por el río Ulla.

Dentro del programa Maio en acción, la Asociación de Nais e Pais (ANPA) del instituto Xulián Magariños ha programado una bajada en rafting por el río Ulla para el 9 de mayo destinada inicialmente a alumnos de primero y segundo.
La sesión está previsto que se desarrolle a partir de las doce del mediodía y consiste en el recorrido desde el puente y coto de Sinde hasta la localidad padronesa de Herbón.
Para participar en esta actividad es preciso anotarse previamente en la conserjería del instituto. Los socios deberán abonar un coste de veinte euros y los no socios veinticinco; además tendrán que pagar el transporte necesario para la actividad.

LA VOZ DE GALICIA, 30/04/09

Los voluntarios de Protección Civil de Valga recogen una oveja que vagaba por las fincas.

Primero fue un cerdo, luego un caballo, hace unas semanas un burro y ahora, una oveja. La sede de la agrupación de Protección Civil de Valga ya parece un albergue de animales.
La oveja llegó en la tarde de ayer a un garaje que utiliza la agrupación después de que los voluntarios fueran a recogerla a un lugar de la parroquia de Setecoros. Como siempre, fueron los vecinos de la zona los que llamaron cuando ya no sabían qué hacer con el animal, al que de momento no le apareció el dueño. «Dis que andaba polas fincas pisando as patacas das leiras que teñen sementadas». Y los agricultores de Parafita, que así se llama el lugar por el que deambulaba la oveja perdida, se cansaron de echarla de sus fincas para que acabase estropeando la cosecha del vecino de al lado, por lo que hicieron lo de siempre, llamar a Protección Civil para que recogiese el animal.
La tarea fue más sencilla que la última que les encargaron, cuando anduvieron varios días buscando a un burro experto en aparecer y desaparecer. Cuando llamaban los vecinos, indicaban el lugar exacto en el que estaba el animal, pero cuando iban a buscarlo, se había ido. Por fin lo localizaron cuando un lugareño lo ató a un poste.
Ahora buscan al dueño de la oveja. Si no aparece, lo tienen claro. «Haberá que preparar carneiro ao espeto».

LA VOZ DE GALICIA, 29/04/09

Las setecientas víctimas de la independencia en Valga.

Bicentenario de la batalla de Casal do Eirigo contra las tropas francesas

Un fantasma recorre Arousa y no es precisamente el del comunismo. El año pasado fue Vilagarcía, cuna de la insurrección en Galicia, la que celebró el segundo centenario de la sublevación contra la ocupación napoleónica. Ayer llegó el turno de Valga, escenario de una cruenta batalla que puso freno al avance de las tropas francesas en su intento por recuperar Tui, Vigo, el sur de la provincia de Pontevedra para su causa.
El 28 de abril de 1809, el primer destacamento, a las órdenes del general Maucunne, apenas había comenzado a avanzar desde Pontecesures cuando tuvo que enfrentarse a las Alarmas: las partidas de campesinos y mariñeiros, verdaderos héroes de aquella guerra por la independencia. El francés salió mal parado de la colina de Casal de Eirigo. Quinientas bajas, entre muertos, heridos y prisioneros frente a las 50 víctimas mortales, los 87 lisiados y los 14 hombres de Valga, Catoira, Caldas, que cayeron en manos enemigas.
Un mercado goyesco, varias asociaciones napoleónicas y el Regimiento de Granaderos de Pontevedra, de 1810, perteneciente a la Brilat, recrearon ayer aquella batalla que contribuyó a ganar una guerra.

LA VOZ DE GALICIA, 27/04/09