La Xunta tiene potestad para implantar trenes de cercanías en la comunidad gallega.

La Administración gallega cuenta con las competencias para contratar la red interior, e incluso construir vías, y poner en circulación servicios competitivos ·· Expertos denuncian la falta de interés del poder político en la vertebración ferroviaria de la comunidad

Corren malos tiempos para el transporte ferroviario, al margen del empuje, que con menor o mayor entusiasmo, recibe la alta velocidad. Casi olvidado ya su momento de esplendor, ahora irrumpe con fuerza el debate sobre la conveniencia de recuperar el tren como mejor fórmula para la vertebración territorial e impulso de una movilidad sostenible y competitiva en Galicia.

Existe una red interior con posibilidades y la Xunta cuenta con las competencias legales para poner a circular en ella servicios que sean competitivos. Esta es la opinión del ingeniero de Caminos y experto en ferrocarril Xosé Carlos Fernández, y compartida por el director de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles, Jaime Barreiro Gil, expresada en una reciente entrevista concedida a este periódico. En ella, Barreiro destacó que en “Galicia está sin hacer el tren interior”y denunció que en el poder político autonómico “no está” la vertebración ferroviaria de la comunidad gallega.

Las apuestas inversoras para la movilidad dentro de Galicia siguen pasando por la red viaria, como demuestra el esfuerzo presupuestario para 2010 de la Consellería de Medio Ambiente, Transportes e Infraestructuras dirigido a la construcción de 160 kilómetros nuevos en vías de alta capacidad.

A día de hoy, como viene sucediendo desde hace años, hablar en Galicia de ferrocarril es sinónimo de línea de alta velocidad (AVE), y aunque, si bien, a nadie se le escapa que es absolutamente esencial para poner a Galicia en el mapa de España y Europa, no es óbice para olvidar las posibilidades que brinda una red ferroviaria tejida en el interior con posibilidades de ser explotada de manera competitiva como una red entre ciudades, como transporte de cercanías y áreas metropolitanas y, para establecer el tan ansiado y demandado servicio de enlace de los puertos gallegos con el resto de servicios de transporte.

Sin embargo, las nuevas cuentas gallegas para el próximo año siguen olvidando el impulso de las cercanías. ?nicamente contemplan una escasa partida de 90.000 euros para el estudio de viabilidad del ente gestor ferroviario y una partida de cuatro millones para sufragar los gastos de la subvención de líneas deficitarias de Renfe. En otro punto, aparecen 1,2 millones para los estudios de metro ligero en Vigo, A Coruña y Santiago.Las apuestas inversoras para la movilidad dentro de Galicia siguen pasando por la red viaria, como demuestra el esfuerzo presupuestario de la Consellería de Medio Ambiente, Transportes e Infraestruturas dirigido a construir 160 nuevos kilómetros de vías de alta capacidad.

La Xunta podría construir sus propias líneas, contratar la red de Renfe y diseñar y ofrecer servicios. En su mano está la llave.

. mnogueira@elcorreogallego.es

EL DATO Liberalización

·· Se prevé que la Unión Europea establezca la obligatoriedad de liberar las líneas ferroviarias interiores en el año 2015. Todavía no es una obligación hacerlo, pero ya podrían circular otros operadores en España, como sucede desde hace tiempo en países como Alemanio e Italia .

EL CORREO GALLEGO, 02/11/09

La comarca del Sar pierde peso.

La caída del censo de habitantes de Rois por debajo de los 5.000 pone de manifiesto una debilidad común de los tres concellos: pese a su óptima situación, van a menos

La caída del censo de población es un cáncer que se extiende desde hace tiempo por los tres concellos de la comarca del Sar (Padrón, Rois y Dodro). La enfermedad está detectada desde hace años pero la cura se antoja difícil pese a que los tres municipios juegan con una situación ventajosa: su óptima localización geográfica, a un paso de la capital de Galicia, próximos a las playas del Barbanza, las Rías Baixas y Altas y con comunicaciones importantes como la autopista A9, y, en un futuro, el tren de alta velocidad.
Pero todo ello no ha sido suficiente para frenar la línea de caída de población hasta el punto de llegar a números rojos. Rois acaba de hacerlo, al bajar de los 5.000 habitantes (tiene 4.994) y con ello, pierde recursos económicos y representantes políticos en la corporación. Padrón lo hizo en el año 1999, cuando el censo municipal cayó por debajo de los 10.000 habitantes y se quedó en 9.597 según el dato del Concello y 9.291 según el de Estadística. Aún hoy, ambas fuentes oficiales no coinciden.
Dodro tiene en la actualidad 3.024 habitantes y la tendencia sigue a la baja. El alcalde de este último ayuntamiento, Arturo Díaz, lo tiene claro: el hecho de no poder construir una vivienda influyó y mucho en el hecho de que muchos vecinos, especialmente las nuevas generaciones, se fueran a otros lugares a vivir. «O noso goberno xa deu algunhas licencias para facer vivendas, algo que ata o de agora era imposible». La aprobación definitiva del Plan Xeral de Ordenación Municipal será decisiva para el crecimiento de Dodro, tanto para la construcción de vivienda nueva como para el asentamiento industrial ya que reserva suelo para tal fin.
Natalidad
«Non aspiramos a ser un concello grande, temos que asentar a poboación que hai e tratar de que, polo menos, non vaia a menos», explica el alcalde de Dodro quien trabaja para que, al menos, las nuevas generaciones no se vean obligadas a marchar por falta de vivienda o trabajo. Lo de atraer habitantes de otros puntos, lo ve «máis difícil». En cuanto a la natalidad, Arturo Díaz constata un «repunte considerable» y se basa en los datos del Centro Público Integrado Eusebio Lorenzo Baleirón, en el que ejerce como profesor. En este curso entraron 11 niños de Infantil y la previsión del próximo año también es buena, según cuenta.
En Padrón, el alcalde Camilo Forján habla de que «estase iniciando a recuperación do censo» de modo que, con respecto a 2006, el concello ganó 266 vecinos, según sus datos.

LA VOZ DE GALICIA, 01/11/09

“Salva o tren” reclama el ferrocarril de cercanías ante el Parlamento.

Obis

La plataforma escenificó la muerte del tren convencional a manos del AVE.

Los integrantes de ??Salva o Tren? realizaron ante el Parlamento autonómico un acto de protesta para presionar a las instituciones antes de que renueven el convenio con Renfe. Para ello, escenificaron la muerte del tren convencional a manos del AVE y pidieron donativos.

La plataforma ??Salva o Tren? retomó las movilizaciones en la jornada de ayer con una peculiar protesta a las puertas del Parlamento autonómico.
Los asistentes, que fueron vestidos de luto y acompañados por un obispo, escenificaron la ejecución del tren convenional a manos del AVE.

Así, durante la marcha gritarón letanías como ??Por un tren de cercanías, ¡loitemos noites de día!? o ??Contra o aillamento, ¡loitemos contra Fomento?.

Fernando Gómez, coordinador de la plataforma, manifestó que la representación salió tal y como tenían previsto y destacó que el objetivo de esta protesta fue el de presionar a las instituciones antes de la reunión para renovar el convenio con Renfe.

Por su parte, una vez finalizada esta representación Lucía Latorre leyó una poesía compuesta por los miembros de la plataforma en la que reivindicaban el funcionamiento del tren de cercanías. Entre otras frases, la poesía decía: ??onde vivimos importa, é un ataque brutal, quítanche o teu tren da porta?.

Por último, los integrantes de ??Salva o Tren? pidieron donativos a los viandantes para seguir haciendo frente a las multas y repartieron 2.500 folletos. En la tarde de ayer Fernando Gómez manifestó que la recaudación obtenida estuvo entre los 100 y los 200 euros.

También declaró que con este acto intentaron transmitir a todas las personas que se acercaban hasta el lugar el dolor por la pérdida del tren y su intención de recuperarlo en un futuro no muy lejano.

Próximas actuaciones > La plataforma ya ha anunciado que en los próximos días solicitará una reunión urgente con representantes del Gobierno gallego teniendo en cuenta que la reunión para renovar el convenio con Renfe se producirá muy pronto. Asimismo, les pedirán que inicien las gestiones con el Ministerio de Fomento.

Por otra parte, la próxima semana la plataforma acudirá a Lorca, en Murcia, para participar en unas jornadas en defensa del ferrocarril en las que expondrán la problemática gallega.

DIARIO DE AROUSA, 01/11/09

Protesta en Santiago de “Salva o Tren”.

“Salva o tren” retoma hoy sus movilizaciones con una concentración a las 11 de la mañana a las puertas del Parlamento autonómico, en la Rúa del Hórreo compostelana. La plataforma pretende presionar a la Xunta que que inicie las gestiones para la trasferencia de las vías convencionales con las que impulsar una red de cercanías en Galicia. Los manifestantes escenificarán la “muerte” del “tren del pueblo”. Será, en palabras de la propia plataforma, una representación de “cómo los políticos utilizan al verdugo del AVE para matar” al tren convencional.

DIARIO DE AROUSA, 31/10/09

Contrabando, literatura y ocio se enganchan al vagón de “Historias do Carril-Cornes”.

Carcor

En su recorrido por la línea que unía Carril con Santiago de Compostela, la primera de Galicia, los vagones guardan pequeñas historias. Desde ayer, el libro Historias do Carril-Cornes saca a la luz 24 de esas historias en forma de relato gracias a la pluma de Xoán Luís Miguéns, socio fundador de la Asociación Compostelá de Amigos do Ferrocarril.
Se trata, sobre todo, de recuerdos de aquellos que alguna vez se subieron al tren que unía la capital de Galicia con la ría de Arousa. A través de anécdotas como las primeras veces que se iba a la playa en el ferrocarril, el traslado de los restos de Rosalía de Castro desde Iria Flavia hasta el Panteón de Galegos Ilustres de Bonaval o el contrabando escondido en el convoy, se consigue dar una fiel imagen de la sociedad gallega de la época.
«Son historias sinxelas sobre xentes tamén sinxelas que reflicten certos feitos característicos das distintas épocas nas que se encadran estes relatos», explica el autor, para después añadir que «a través deles podemos albiscar como se desenvolvía o mundo ferroviario galego na sociedade do derradeiro terzo do XIX e boa parte do XX».
Y no solo a través de la palabra escrita se ofrecerá el análisis de la sociedad de aquellos años. También se incluyen fotografías y grabados de la época.

LA VOZ DE GALICIA, 29/10/09

O tren de Varela.

Contaban os ferroviarios máis vellos, que o inesquecible tren de Varela (aludindo ó maquinista do mesmo nome) recollía xente polo camiño de ferro desde Vilagarcía a Compostela. Naqueles tempos xa afastados, a cidade de Santiago era considerada como o corazón e a capital do país, porque, a pesar de non ser a capital da provincia, tiña organismos e institucións que só se atopaban alí e que representaban a toda Galicia. Tamén xa daquela había xente de lonxe que recoñecía que Santiago era Santiago. Eran os tempos da grande armada inglesa, daquela mariña de guerra que, desde Trafalgar, ou antes, dominaba os camiños das ondas dos mares do golobo. Naqueles momentos Vilagarcía era considerada o porto natural de Compostela.
Así eeran as cousas e así foi que a armada inglesa tomou o mar de Arousa case como se fose a súa casa e os seus compoñentes “ships” viñan a fondear periodicamente no medio e medio da ría, de tal xeito que o mar de Arousa (ou Arosa Bay, como dicían eles) e Vilagarcía eran como a súa segunda “house”. Aquí descansaban, reparaban forzas e barcos, folgaban e xogaban uns partidos de “football” cos nativos. Parece ser que naqueles tempos os británicos se negaban a xogar contra os de Vilagarcía se os opoñentes galegos xogaban con zocos, tal como fixeran no primeiro partido, no que, sen querer por suposto, tronzaron algunha canela inglesa. Lances dese novo deporte que non lles fixeron ningunha graza os oficiais británicos.
Pero os mariños ingleses eran moi afeccionados a viaxar noutro medio de transporte que precisamente inventaran eles: o tren. Nel desprazábanse desde a vila para coñecer Santiago. Aínda non hai moitos anos que vivía algunha testemuña presencial que podía dar fe do pasmadiños que ficaban os “homes do pano azul e branco” cando, camiño de Compostela, en plena viaxe e desbruzados polas xaneliñas dos vagóns para ollar a fermosa paisaxe, e tamén os os paisanos vían como en calquera lugar do trazado o tren de Varela recollía viaxeiros ou viaxeiras cargadas con feixes de verduras, cestas de froita, latas de leite… é dicir, con case todo o que se podía mercar en Santiago, sobre todo se era o día de feira na carballeira de Santa Susana. O asombro dos ingleses era motivado por ver como os viaxeiros subían ó tren con só facerlle sinais coas manos ó maquinista, que paraba ou minoraba a marcha.
Unha vez foron testemuñas directas dun caso que colleu moita sona polo gracioso que resultou para os que o presenciaron. Resulta que, cando o tran de Varela empezou a subir fatigosamente a costa da Escravitude, camiño de Santiago, este maquinista viu que pola beira da vía ía, a bo paso, un vello coñecido natural do concello de Rois. Cando a locomotora chegou á súa altura, o señor Varela, despois de saudalo, preguntoulle a onde ía e o outro contestoulle que a Santiago. ö escoitar iso, o señor Varela díxolle ó seu amigo:
-Pois veña, xa podes ir subindo ó tren.
E vai o outro e contestou:
-Hoxe non, que teño presa.
Mais un día, o pasmo dos mariñeiros británicos foi aínda máis grande cando, en plena viaxe e dentro do vagón, oíron berrar un vello que dicía alporizado:
-¡Parade, parade que me baixo!
O vello debruzouse por unha das xsanelas e poñendo as mans arredor da súa boca volveu berrar cara á cabeceira do tren:
-¡Parade aquí, que teño que baixar, parade dunha vez, oh!
Non se sabe como foi que o maquinista e o fogueiro puideron oír, e sobre todo entender o que lles berraba aquel vello, pero o certo foi que, por non ser menos que outras veces en que o tren paraba (ou case) para recoller a algún paisano, esa vez tamén parou para que o vello dos berros puidese baixar do convoi.
Todos os ingleses que estaban debruzados polas xaneliñas dos vagóns puideron ver como o curioso viaxeiro baixou do tren e como seguidamente se dirixiu ata a beira da máquina onde lles dou unha explicación ó señor Varela e ó seu fogueiro ante a expectación e asombro xerais.
-? que vou ver un menciñeiro preto de aquí mesmo (díxolles aos pilotos da Sarita).
E coa mesma, aquel vello botou a andar co paraugas pendurado da chaqueta na parte traseira do colo, mentres o tren de Varela asubiaba de novo e, botando fume por todos os lados, emprendía a marcha por riba daqueles mollados carrís, camiño de Compostela, en tanto que os ingleses ficaban mirando uns para os outros con ollos regalados sen crer o que acababan de ver.

Relato do libro de Xoán Luís Migúens García, “HISTORIAS DO CARRIL-CORNES”, presentado hoxe en Santiago.