Entrevista con Andrés Quintá Cortiñas. ‘En 2007 tenemos previsto abrir una filial en el extranjero’

El gigante del aluminio de Valga cerró el ejercicio 2006 con inmejorables resultados: cuenta con seiscientos empleados y su volumen de ventas alcanza ya los 86 millones de euros

Andrés Quintá, propietario de la empresa Extrugasa, no deja de trabajar ni esos días en los que, por motivos vacacionales, su empresa está a medio gas y solamente los técnicos de mantenimiento y el personal de seguridad se deja ver por su gigantesca fábrica de aluminio de Valga.

Tras 53 años en el sector, en el que comenzó de aprendiz y en los que reconoce que nunca tuvo «un día de vacaciones», puede presumir de haber convertido su pequeño taller de herrería en uno de los grupos empresariales de más envergadura de Galicia – Extrugasa está integrada en el Grupo Quintá, del que dependen otras seis firmas -.

Pasó medio siglo desde que comenzó a forjar hierro, ¿cuál es la clave para convertir un pequeño taller en un emporio empresarial?

Una pregunta inteligente. La clave es buscar un objetivo y seguir en línea recta sin desviarse. A día de hoy, Extrugasa es una empresa que no puede llamarse pequeña y, sin embargo, siempre que se embarca en un nuevo proyecto lo hace poco a poco. Las empresas no pueden lanzarse a aventuras que, si salen mal, dejen mal paradas a la firma madre y puedan afectar a sus trabajadores. La otra gran clave, claro está, es trabajar muy duro.

En eso parece usted experto, porque desde luego no es un jefe que sólo pisa despacho…

Por supuesto que no. El jefe tiene que estar al pie del cañón a todas horas… Saber que se hace en todo momento y conocer desde cómo se producen a cómo se comercializan todos sus productos. Si no trabajas todo el día, si no estás en la fábrica, no eres realmente un jefe.

Vamos, que cuanto mejor le van las cosas a Extrugasa usted más trabaja…

Pues sí. Y la verdad es que en la última década los resultados son inmejorables. Crecimos un trescientos por cien en facturación y también en la creacción de puestos de trabajo. Pasamos de 202 empleados a 614 y, por ejemplo en este año que acaba de terminarse, las ventas reales rondan los 86 millones de euros.

Hable de los planes para el 2007…

Estamos creciendo a un ritmo bastante alentador en lo que a exportaciones se refiere, es decir, ahora mismo estamos exportando un 30% de lo que vendemos, por lo que el 2007 va a ser el año en el que abramos una filial en el extranjero. Cada vez hay más países del norte y el este de Europa así como de América interesados en que nos instalemos allí, y ya no queremos demorarlo más.

Se había planteado la posibilidad de que la filial se abriese en Venezuela, ¿sigue en pie esa opción?

En Venezuela seguimos con los proyectos de las plataformas marinas pero últimamente, para la filial, pensamos también en algunos países del Este de Europa, muy atractivos para las inversiones.

Andrés Quintá habla largo y tendido de sus proyectos empresariales, y tampoco calla si se le pregunta directamente por la competencia.

Ros Casares, una empresa de su sector, está a punto de desembarcar en Vilagarcía, ¿cree que le va a suponer una dura competencia?

Para nada, ellos se dedican al acero y nosotros al aluminio. Además, aunque fuesen competencia, estaríamos igualmente encantados de que una empresa como esa venga a la comarca y cree riqueza y empleos.

Igual en lo deportivo, en el baloncesto Ros Casares sí es rival…

Yo creo que no nos hace competencia ni en lo económico ni en lo deportivo. Nosotros, con el equipo, tenemos que ir a lo nuestro y hacerlo bien.

LA VOZ DE GALICIA 04/01/07 ESPECIAL COPA DE LA REINA DE BALONCESTO