La aparición de una marsopa en el río Ulla genera una gran expectación en Pontecesures.

Los vecinos de Pontecesures pudieron contemplar ayer en directo a una marsopa que se pasea por el río Ulla, en las inmediaciones del puente romano. El animal llegó al municipio el pasado jueves y ayer responsables del Centro de Estudios dos Mamíferos Mariños (Cemma) trataban de localizarla.

Los primeros en ver al animal fueron los responsables de Protección Civil, que pensaron que desaparecería con la bajada de la marea, pues se trata de un mamífero de agua salada y, aunque ésta llega a Pontecesures con las mareas, podría no ser suficiente para mantener con vida a la marsopa. En vista de que ayer por la mañana, continuaba deambulando por el río, se dio aviso al Cemma, que desplazó una unidad al municipio. A última hora de ayer, todavía no había sido localizada. Decenas de curiosos se pasearon ayer por la zona para tratar de avistar a este ejemplar. Las marsopas fueron una de las especies por las que más se temió durante la catástrofe del Prestige, pues había documentada la existencia de una población en la ría arousana. La aparición de este ejemplar demuestra que sigue en la ría.

:: La Voz de Galicia :: 20/01/07

APARECE EN AGUAS DEL ULLA UNA MARSOPA, ESPECIE EN REGRESI�?N

La presencia de un ejemplar de «Phocoena» en el Ulla causó gran revuelo ·· Se trata de la especie más pequeña de arroaz, en clara regresión en toda Europa ·· Mide 1,60, está bien de salud y el Cenma trata de rescatarlo.
Niños y curiosos, esperando a avistar la marsopa ayer en el Ulla

La inusual presencia de un ejemplar de marsopa (nombre científico Phocoena, phocoena) o toniña en gallego en las aguas del río Ulla a la altura del campo padronés de A Insua (entre el puente del ferrocarril y el puente interprovincial de Pontecesures) despertó ayer a última hora un gran revuelo en la zona. Y es que este mamífero marino, el más pequeño de la especie de los arroaces en el hemisferio Norte, no suele desembarcar en zonas de río y menos tan arriba de la desembocadura.

Además, esta especie de delfín, según informaron ayer a este diario técnicos del Cenma (Coordinadora para el Estudio de Mamíferos Marinos), está en clara regresión en toda Europa. De hecho, en la cuenca mediterránea «ha desaparecido hace años, y en la costa ibérica sólo puede apreciarse su presencia en Galicia y en aguas de Portugal».

Su remonte aguas arriba del Ulla ha sorprendido tanto al Cenma como a ecologistas y vecinos. Los registros históricos a los que tiene acceso el Cenma localizaron la presencia esporádico de alguno de estos ejemplares «hace ya años» en las proximidades de Catoira «pero nunca tan arriba». Esta presencia era motivada sobre todo porque el mamífero marino estaba enfermo o herido y subía con la marea, insisten los técnicos, pero «rara vez» por despiste.

El ejemplar localizado en Padrón mide 1,60 metros de largo, «aparentemente goza de buena salud, no está delgado, ni presenta heridas ni problemas de respiración. Se trata de un animal adulto y es muy raro que suba tan arriba», insisten los técnicos del Cenma, quienes apostillan que la población gallega de Phocoena tiene la peculiaridad de «ser más grandes, no se sabe muy bien por qué».

La confusión

Cuando el Cenma recibió el aviso de que se localizó un arroaz en el Ulla pensaron que se trataba de un delfín común, el arroaz que «vulgarmente y por confusión los marineros llaman toniña y que no se corresponde con la especie», insisten desde la coordinadora. «Nuestra sorpresa fue encontrarnos con una marsopa (no especificaron si era macho o hembra). Esto es inusual y desconocemos las razones por las que remontó el Ulla. Lo que sí está es asustada».

A última hora de ayer, técnicos y Policía Autonómica valoraban la posibilidad de rescatar a la marsopa, una tarea complicada ya que la oscuridad en la zona empezaba a ser total.

LAS CLAVES Un animal de agua salada y esquivo

La preocupación del Cenma también radica en el estado de las aguas del Ulla, con poca salinidad y que el descenso del nivel de agua deje varado al mamífero. Indican que la marsopa casi nunca se acerca a las rías porque necesita aguas saladas y que es muy esquiva.

Una población en claro peligro

En la costa ibérica se calcula que hay entre 300 y 500 marsopas y 10.000 delfines comunes. Son difíciles de estudiar y observar, y su comportamiento es diferente al resto de arroaces. Anualmente muere una media de 10 toniñas al caer en aparejos de pesca .

:: El Correo Gallego :: 20/01/07

UN DELFIN DESORIENTADO REMONTA EL ULLA HASTA CESURES

Un curioso animal se ha convertido en el principal centro de atención de los vecinos de Pontecesures en los últimos días, en los que corre de boca en boca la presencia de un pequeño «arroaz» en las aguas del río Ulla, justo en las inmediaciones del puente interprovincial.

Según expertos de la Coordinadora para el Estudio de Mamíferos Marinos (CEMMA) se trata de una «toniña», un animal similar en su forma a los delfines que tiene entre 1?5 y 1?8 metros de largo. Su peso ronda los sesenta kilos y, al parecer, lleva ya varios días en el Ulla. Varios marineros, pescadores y otros vecinos avistaron su aleta hace un par de días, pero no fue hasta ayer cuando su presencia alcanzó mayor relieve y los curiosos comenzaron a acercarse hasta ambos márgenes del río para intentar percibir al mamífero, que está vivo y según todo hace indicar no sufre ningún tipo de herida o daño físico. «La primera vez que lo vi no daba crédito. A veces se asusta con la gente, pero está por ahí nadando de un lado para otro. En un momento se ve y al segundo vuelve a sumergirse y aparece unos metros más lejos», indicaba uno de los vecinos que logró verlo.

La Policía Local cesureña se encargó en la tarde de ayer de avisar al CEMMA, que desplazó a varios expertos al lugar. Allí tomaron varias fotografías del mamífero para determinar con exactitud su especie. La caída de la noche impidió que pudieran tomar ningún tipo de determinación sobre qué hacer con el animal, del que se limitaron a realizar «un seguemento para ver o seu comportamento que, en principio, é totalmente normal e parece que non ten problema ningún. Adícase a nadar nas zonas de máis de catro metros de profundidade», indicó Alfredo López.

Dificultades > Hasta la mañana de hoy no tomarán una decisión definitiva sobre qué hacer con la «toniña». «Pola noite non se podía facer nada, porque poderíamos causar danos ó animal», por lo que será con la luz del día cuando evalúen la viabilidad de las distintas alternativas. La primera es dejar que el propio mamífero vuelva solo al mar puesto que «se chegou ata alí pode marchar perfectamente», apunta López.

Aún así el CEMMA está en contacto con Protección Civil y busca embarcaciones por si deciden finalmente trasladar el animal a la desembocadura de la Ría, algo que podría comportar complicaciones y peligros. «Intentar pódese intentar, outra cousa é logralo. Habería que levalo polo menos ata a zona de Riveira e iso suporía que tería que estar unha media hora sen auga, o que pode ser un risco», dice el miembro del CEMMA, que además añade que «hai que ter en conta que está vivo e vai ser moi difícil poder coller ese animal».

Sobre los motivos por los que el «arroaz» llegó hasta Pontecesures también hay opiniones diferentes. Bien podría haber aprovechado un momento en el que la marea estuviera alta para ir detrás de un banco de peces que pudiera servirle de comida, o también es posible que se hubiese desorientado.

La llegada de la «toniña» a Pontecesures fue calificada como «sorprendente» por López, puesto que no es para nada «normal» que un animal de estas características remonte el río hasta tan lejos. «Isto é de todo inusual, sobre todo nesta época do ano», dice el integrante del Centro para el Estudio de Mamíferos Marinos, que explica que «téñense visto máis exemplares deste tipo nas inmediacións das Torres do Oeste, no municipio de Catoira, pero incluso iso está fóra da normalidade».

:: Diario de Arousa :: 20/01/07