Los ecologistas buscan voluntarios que ayuden a custodiar los ríos Ulla y Umia.
El río Ulla constituye un importante ecosistema que hay que vigilar, y más ahora que se realizan las obras del viaducto del Tren de Alta Velocidad (TAV).
Adega presenta su propuesta a los vecinos de Pontecesures, Catoira y Valga
El río Ulla constituye un importante ecosistema que hay que vigilar, y más ahora que se realizan las obras del viaducto del Tren de Alta Velocidad (TAV).
La Asociación para a Defensa Ecolóxica de Galicia (Adega), en colaboración con entidades como la Asociación de Viticultores Ribeira de Arousa ( con sede en Valga) o las comunidades de montes de Catoira y Oeste, desarrolla un plan de custodia de los ríos Ulla, Umia y Lérez.
Para ello es preciso disponer de una red de voluntarios y/o colaboradores que ayuden a vigilar estos importantes cauces fluviales. Y especialmente el Ulla, que dispone de diferentes figuras de protección medioambiental y que puede necesitar más que otros un plan de custodia, debido a las importantes obras que se realizan sobre su lecho para trazar el Eje Atlántico de Alta Velocidad.
Tal y como se hizo ya en A Estrada, Moraña o Caldas de Reis, Adega va a organizar charlas en Valga (el lunes), en Catoira (el martes) y en Pontecesures (el miércoles) con el fin de exponer al público en qué consiste el denominado Proyecto de Custodia Fluvial, cuya finalidad principal «es dar a conocer el papel fundamental de los ríos y sus problemáticas ambientales asociadas y fomentar prácticas y comportamientos que permitan a los ciudadanos el mantenimiento y mejora de los recursos fluviales mediante acciones que faciliten su participación, como es la custodia del territorio».
Fomentar el desarrollo rural, contribuir al conocimiento de los problemas que afectan a los cauces fluviales, involucrar a la entidades locales y a los propios ciudadanos en la custodia del territorio y promover sinergías entre municipios vecinos son solo algunos de los objetivos específicos que se marcan con este proyecto.
Como lo es crear una red de ciudadanos que trabajen de forma coordinada y conjunta en la mejora de los ríos Umia, Ulla y Lérez, según explican en Adega.
Los ecologistas persiguen, igualmente, «fomentar el desarrollo de la educación ambiental a nivel local, favorecer la incorporación del voluntariado ambiental y establecer proyectos piloto de participación ciudadana en los ríos».
En la misma organización ecologista indican que esta propuesta «permite velar por la conservación de los valores de un territorio, tanto si tiene una figura de protección asignada por la Administración como si carece de ella».
Una vez impulsado el plan de custodia y preservación de los ríos, estos pueden convertirse en «ejemplo de que una buena estrategia de conservación no entra en conflicto con la expansión de actividades económicas, y por el contrario, los bienes y la riqueza de los territorios custodiados ganan en reconocimiento y aumentan sus posibilidades de desarrollo».
En los 12 primeros meses de proyecto se fomentará la creación de tres redes de custodia fluvial, una para cada río implicado. En la tercera fase se establecerán los protocolos de actuación y se desarrollarán acciones para alcanzar el buen estado ecológico de los sistemas fluviales. Para finalizar, se diseñará una campaña divulgativa sobre los valores naturales y las acciones a desplegar.
FARO DE VIGO, 06/04/11
0 comentarios